«El empadronamiento está creciendo y el perfil es gente joven y teletrabajadora»

—Hoy dan el pistoletazo de salida a la Fiesta Mayor de Sant Bartomeu, ¿como se presenta?

—Como preveíamos que todo se podría volver a complicar, empezamos a preparar una Fiesta Mayor más parecida a la de 2020 que en la de años anteriores. Hacemos actos que nos permiten tener un control de aforos y de las distancias. Viviremos la procesión del Pa Beneït, el pregón, que se hará en el polideportivo, conciertos, con el público siempre sentado, y actos culturales. Intentamos mantener la llama viva, para que no se nos apague el fuego de Fiesta Mayor.

—¿Han podido recuperar actos?

—Hemos recuperado el juego de los bitlles catalanes. Nos hemos dotado de más bolos, para tener tiempo de poder desinfectarlos. El baile de sardanas lo hemos reconvertido en un concierto. Y con respecto a la carrera atlética, que el año pasado fue virtual, este año fue presencial. Pedimos que no hubiera presencia de público a la salida y la llegada y que a la gente la mirara desde el balcón o que se distribuyera por las calles de manera dispersa. Y los últimos días de fiesta acogeremos en el Casino la exposición de gegants que está recorriendo el Baix Gaià.

—¿Cómo está yendo la temporada turística?

—Me aventuro a decir que la temporada este año no será tan buena como la de 2020. El año pasado, extrañamente, tuvimos una temporada corta pero buena en los resultados. Este año no tenemos tanta afluencia de turistas de segunda residencia, más allá de los fines de semana. Además, los campings han sufrido las idas y venidas de los criterios y recomendaciones que han hecho los países europeos y eso ha supuesto una montaña rusa de altas y cancelaciones constantes. A finales de temporada, acabaremos de hacer balance. Con todo, desde el Ayuntamiento seguiremos aprobando líneas de subvención para el sector.

—¿Qué resultado han tenido las campañas de promoción económica y turística?

—Las campañas funcionan bien. El mensaje va calando y nos está dando resultados en aquello que queremos que es desestacionalizar y que venga más gente a Roda durante más meses del año, que les guste y acaben haciéndose residentes. Poco a poco, este mensaje se nos está traduciendo en un mayor empadronamiento, en una franja de edad de gente joven, con profesiones que les permiten teletrabajar siempre o algunos días a la semana. Por eso, ponemos todos los esfuerzos para que las compañías desplieguen la fibra y ahora tenemos el compromiso de dos que en menos de un año nos cubrirán el 100% del territorio municipal. Eso da vida y atrae nuevos residentes. De rebote, supondrá que haya establecimientos que estén abiertos durante más tiempo y eso favorecerá la economía del pueblo.

—Los presupuestos tienen un claro carácter social. ¿Cuáles son las líneas principales?

—Por una parte, tenemos ayudas a las empresas. Hay una línea de ayudas para pymes y autónomos que hayan sufrido una reducción de los ingresos a causa de la pandemia dotada con 100.000 euros. También tenemos en marcha la subvención de emprendeduría y contratación, que cuenta con una partida de 60.000 euros. Por otra parte, tenemos las ayudas de servicios sociales.

—En estas últimas, han modificado los criterios.

—Aprobamos por unanimidad en el pleno un reglamento muy mejorado que permitirá que familias que se encontraban en el umbral y que tienen dificultades, pero que no podían entrar en la rueda de servicios sociales ahora puedan acudir. Hemos aumentado la cantidad económica subvencionable por unidad familiar, llegando hasta 1.500 euros. Además, hemos ampliado los objetos subvencionables y ahora, por ejemplo, serán subvencionables unas gafas o una ortodoncia, pero también el coste de las extraescolares que hacen a las AMPAS de las escuelas públicas de Roda.

—Las cuentas incluyen inversiones por|para 2 millones de euros. ¿Cómo se materializarán?

—Apostamos por hacer multitud de pequeñas o medias actuaciones, en lugar de centrarnos en una gran obra. Algunas ya las hemos puesto en marcha como son las actuaciones en la escuela Cucurull, donde se han hecho los baños y el espacio de oficinas nueve. Estamos asfaltando el parking que hay entre el polideportivo y esta escuela. Estamos renovando vestuarios, baños públicos y haciendo tareas de pintura en el campo de fútbol. A finales de septiembre haremos una cocina nueva, ampliaremos el espacio de reunión y mejoraremos la instalación eléctrica del hogar de jubilados. Sustituiremos farolas y seguimos renovando la red de agua.

—Roda ha vivido episodios de tensión vecinal a raíz de algunas ocupaciones. ¿Qué pasos puede dar el Ayuntamiento para evitarlas?

—Podemos hacer muy poco, porque la legislación no nos da herramientas. Ahora bien, intentamos utilizar todas las que tenemos. Estamos haciendo un padrón de viviendas vacías para poder ejecutar el incremento del 50% del IBI a los grandes tenedores que no pongan la vivienda como alquiler social. Hacer este padrón comporta mucho trabajo, porque tenemos que localizar a los propietarios y es muy difícil, ya que la vivienda ha pasado por manos de varias entidades bancarias hasta acabar a un fondo buitre. Requerimos a los grandes tenedores que adopten medidas en sus propiedades para evitar que estén ocupadas. Y de forma preventiva, cuando detectamos que hay una casa que puede estar ocupada, pero todavía no hay nadie dentro, cortamos los suministros. Estamos alerta y seguiremos dando el mensaje que es difícil ocupar en Roda.

—Alcaldes del Tarragonès y del Baix Penedès reivindican el paso de mercancías por el interior. ¿Qué hoja de ruta seguirán?

—Tenemos una reunión a mediados de septiembre y seguiremos presionando. Sabemos que las mercancías saldrán provisionalmente por el Tercer Hilo. Lo que queremos es que a largo plazo lo hagan por el interior, pero no por la línea Reus-Roda. A nuestra petición se han sumado Vila-seca, Cambrils, Salou, Reus. Queremos incorporar el Puerto, la industria química, la Cámara y las asociaciones empresariales. Actuaremos como un lobby de presión. Ya lo hicimos con el Pacto de Berà y conseguimos la salida de los camiones de l'N-340.