Educación
Empieza el curso en el instituto Ramon Barbat de Vila-seca con alumnos vacunados y pudiendo interactuar en el patio
El alivio de las medidas contra la covid-19 permitirá el centro recuperar una cierta normalidad
Después cada grupo ha ido hacia su aula. Siempre con la mascarilla puesta. «A veces te quedas sin aire, pero en el patio al menos podremos hablar con más gente. El año pasado en la escuela estábamos en grupos más cerrados», ha afirmado Mario Martínez, de 1.º B. Su compañera de clase, Deba Sánchez, lo llevaba con más resignación. «Como el año pasado ya llevamos mascarilla no es un gran cambio, ya estoy acostumbrada», ha apuntado.
Más tranquilidad
La experiencia del curso anterior hace que los equipos docentes afronten el actual con más garantías. «Empezamos más tranquilos. Conocemos las medidas que hicimos el año pasado y una parte de la comunidad educativa ya está vacunada», ha afirmado Guinovart. La directora ha puesto en valor que los jóvenes se puedan relacionar en los espacios comunes. «El año pasado para ellos fue muy duro. Todas estas medidas harán que necesiten mucha ayuda emocional. Sí que iremos volviendo a la normalidad pero los tendremos que ayudar a recuperarse», ha señalado. Unas restricciones que tampoco fueron fáciles para el profesorado, que se tenía que encargar de vigilar las relaciones personales de los alumnos.
Otra de las novedades es que si en un grupo burbujea hay un positivo, los alumnos que se hayan vacunado no tendrán que confinarse. «Como ya nos pusimos las pilas con la parte digital, daremoslas clases sincrónicas desde el aula y los alumnos confinados la seguirán desde casa», ha valorado Guinovart. Además, en la entrada del centro ya no se coge la temperatura a los jóvenes.
Menos alumnos y más profesores
Según datos del Departamentd'Educació, en el Campde Tarragona y Baix Penedès el curso ha empezado con 118.209 alumnos en etapa obligatoria. Respecto del curso anterior son 866 matriculados menos a educación infantil, 109 más a primaria y, 480 alumnos más a ESO. Al mismo tiempo, se mantienen 407 refuerzos extras, además de 88 dotaciones de personal de atención educativa que se incorporaron al sistema el curso pasado, y se incrementa la plantilla con 74,5 docentes.
Al mismo tiempo, Educacióha adelantado que en el 2022 se convocarán 4.377 nuevas plazas de oposición, un hecho que permitirá reducir el interinatge y por lo tanto, estabilizar las plantillas. En el 2018, antes de empezar el proceso de estabilización, el interinatge era del 34%, y con las recientes incorporaciones a raíz de las últimas oposiciones, la cifra se ha reducido hasta el 24%.