El lunes se inicia el derribo de las viviendas afectadas por la canalización de Barenys
Los 29 inmuebles expropiados irán al suelo con el fin de poder meter los cajones por donde pasará
El próximo lunes, 24 de enero, entrarán las máquinas para empezar el derribo de las 29 viviendas afectadas por las obras de canalización del barranco de Barenys de Salou, un proyecto que tiene como objetivo acabar con las inundaciones que se producen de forma recurrente al barrio de la Salut, en la zona de Ponent, cada vez que hay un episodio de fuertes lluvias.
Durante estos días se han estado llevando a cabo los trabajos previos a las obras, consistentes en el desvío de las redes de servicio, a fin de que, si no hay ningún imprevisto de última hora, el lunes se dé inicio a un proyecto que se arrastra desde hace años. Sin embargo, las últimas semanas se han tapiado algunas de las viviendas expropiadas con el fin de evitar el empleo|ocupación de estos.
Los derribos que empiezan el lunes son los de los inmuebles que han sido expropiados en el tramo entre las antiguas vías de tren y el paseo Miramar, es decir, toda la hilera de inmuebles que hay detrás del número 1 de la calle de Barenys. El proyecto de canalización del barranco de Barenys requerirá también las expropiaciones de los terrenos que hay entre la vía del tren y el vial del Cavet. Las expropiaciones de este primer tramo culminaron a finales del año pasado y han ido a cargo de la Generalitat de Catalunya. Los derribos son necesarios para poder construir los cuatro cajones que tienen que canalizar las aguas de Barenys hasta su salida al mar.
El Gobierno, a través de Infraestructuras.cat, adjudicó los trabajos financiados por la Agència Catalana de l'Aigua (ACA) de un proyecto, cuyas obras se han dividido en dos lotes que ejecutarán las empresas Lantania –en esta primera fase– y Copcisa, por valor de 3,1 millones de euros y 4,5 millones de euros –sin IVA–, respectivamente. Así, el importe global de la canalización del barranco ascenderá además de 8 millones de euros.
Los dos lotes en los cuales se ha dividido el proyecto hacen referencia a los dos tramos del barranco que se adecuarán. El primero es el que afecta al tramo final, entre la vía del ferrocarril y el mar, con la canalización subterránea y contempla los trabajos que empiezan el lunes con el derribo de las fincas. El segundo lote es el que va de la vía de tren hasta el vial de Cavet, y en este ámbito el agua circulará en superficie.
Una vez se hayan terminado los trabajos de canalización del barranco de Barenys, este tendrá una capacidad de desagüe de 140 metros cúbicos por segundo desde el vial hasta el mar. Los trabajos, que podrían finalizar a lo largo de 2023, cambiarán completamente la fisonomía de la zona.
Una de las últimas inundaciones en el barrio de la Salut se produjo el 23 de octubre de 2019 cuando quedó completamente anegat después de que el barranco de Barenys se desbordara a causa de una llevantada. Las aguas salieron adelante de su caudal a la altura del vial de Cavet, que es la carretera que une Salou con Cambrils. En el barrio de la Salut, el agua acumulada en la calle llegaba al medio metro de altura, una circunstancia que se ha repetido constantemente en episodios de fuertes lluvias. Un fuerte temporal de mar también provocó estragos en enero de 2020, pero el barrio de la Salut acumula un largo historial de inundaciones en sus calles.