Decennals
Las Decennals de Valls, de generación en generación
A siete días en las fiestas, se han vendido 32.000 entradas
Cuenta atrás para las Festes Decennals de Valls. En una semana empezarán diez días de actos culturales y religiosos en honor a la patrona de la ciudad. La Candelera se celebra cada diez años y marca las etapas vitales de los vallenses. Para Marta Roca, que nació el 4 de febrero del 2011, serán suas primeras Decennals. La ilusión lainunda: «Me habría gustado mucho nacer antes para vivir las Decennals, me muero de ganas». La pandemia ha obligado a trasladar de año las fiestas por primera vez en la historia. Fijadas el año 2022, la situación sanitaria sigue afectando a la programación, con horarios adaptados y aforos limitados. Aún así, se harán 525 actos y sólo quedan 6.000 entradas en venta. Se han vendido 32.000.
Marta dice que en la escuela les han explicado cómo son estas fiestas. Con compañeros de clase participarán en los actos de cultura populares. «El quemás ilusión me hace es el encendido de las luces, se ven tan grandes, creo que será muy bonito», opina la pequeña. Tiene muchas ganas que empiecen y no descarta hacer de voluntaria cuando sea mayor, como su madre. «Nací para las Decennals, todavía te hace más gracia hacer de voluntaria, sería muy increíble», dice emocionada. Pere Roca era muy pequeño en las últimas Decennals, tenía poco más de un año y sólo recuerda aquello que le han explicado. «Iba subido en el cuello de mipadre a ver los espectáculos y actos», detalla. Estas fiestas también serán especiales para él porque serán las primeras en plena conciencia y porque las vivirá en familia.
Más experiencia tieneMariona Salat que este año vivirá sus quintas Decennals. Su familia es devota de la Mare de Déude la Candela y muchos de los recuerdos están vinculados a los actos religiosos. De hecho, se llama Maria Candela en honor a la madre de dios y como muchos de los vallenses las fiestas han marcado su etapa vital. «Tengo pocos recuerdos de las primeras, sólo del encuentro de castellsen el Abad Llort, de la procesión y del oficio, las siguientes en plena adolescencia fueron a los conciertos y teatros y con los niños pequeños las vivimos más en los patios de las escuelas y asistiendo a los actos del séquito popular», recuerda Salat. Ahora, con los hijos mayores volverán a disfrutar de los actos culturales. «Es una fecha muy especial en casa, las hemos vivido muchísimo porque somos creyentes», añade.
Quedan 7 días
Como cada mañana desde el 21 de octubre pasado, los vallensesparticipan de la cuenta atrás del contador de la céntrica Fontde la Manxa. A siete días de las fiestas, los operarios se apresuran a terminar los últimos flecos técnicos para hacer posible todos los actos. Valls tendrá 40 escenarios repartidos por la ciudad, entre los cuales destacan las tres velas, que se ubicarán en el claustro del Convento del Carme, en la plaza del Oli y en el barrio del Fornàs. De hecho, la Vela Principal, acogerá los conciertos de gran formato y portada desde Roma, se empezará a instalar en la explanada del Fornàs este sábado.
La organización ha tenido que ajustar horarios y formatos en quince de los 525 actos programados con el fin de adaptarse a las medidas acordadas por las autoridades sanitarias. Aunque ya no habrá toque de queda, se mantendrán los cambios de horarios de los conciertos de Don Patricio, La Pegatina i Macaco, de La Oreja de Van Gogh y Rozalén, el del 10 de las Decennals, así como el baile de gala. Todo ellos acabarán a medianoche y se harán con el público sentado. En cambio, el resto de actividades se mantienen en el formato anunciado, sin restricciones ni tampoco ajustes. En concreto, se trata de los actos enla calle, como ahora el pasede las luminarias musicales, el mapping o las actividades de cultura popular, entre otros.
32.000 entradas vendidas
La organización celebra que se hayan vendido 32.000 entradas y que sólo queden unas 6.000. «Valls tiene más de 25.000 habitantes, estamos muy contentos con las cifras de la venta anticipada», afirma el director artístico de las Decennals, Jordi Bertran. El responsable ha concretado que se han vendido prácticamente todas las localidades de la Vela Principal y ha destacado que se han ampliado las funciones protagonizadas por los artistas habitantes de Valls Mar Ulldemolins, Cristina Murillo y Ricard Farré con el fin de dar cabida a la totalidad del público. «Harán entre dos y tres sesiones más, en parte porque había mucha demanda y también para dar cumplimiento al aforo del 70%», señala Bertran.
A modo de ejemplo, también explica que se han agotado las entradas del musical del Petit Príncepo del espectáculo familiar Bye bye Monster.«Todavía quedan localidades a espectáculos como la ópera de la La Flauta Màgica, pero estamos contentos porque tenemos muy buena entrada, también se pueden conseguir todavía entradas enla setentena de propuestas de espectáculos familiares y enla veintena de actividades en la Fira Castells», remarca el responsable artístico.
Con respecto a la Trobada de Colles Castelleres de les Festes Decennals, que se celebrará el domingo 30 de enero, Bertran ha quitado hierro al hecho de que algunas collas, como la de Barcelona o Sants, hayan anunciado que no participarán por la situación de pandemia. De hecho, el director artístico ha insistido en que se han puesto encima de la mesa todas las facilidades para que las collas asistan, ya que pueden optar desde hacer pilares de poca envergadura a construcciones más importantes. «El acontecimiento marcará el termómetro de la salud del mundo casteller; los castells fueron la última actividad a reincorporarse de la cultura popular y la realidad es que han sido muy penalizados con los planes de reanudación», opina.
Superando adversidades
Por otra parte, ante algunas voces críticas, que no ven con buenos ojos que las Decennals se celebren por la situación sanitaria, Bertran defiende que la decisión de sacar adelante las fiestas se tomó a través de los patrones y las comisiones que conforman la fundación que organiza la festividad. «Hemos sido muy respetuosos con las estructuras organizativas, son muy plurales, con tantas comisiones y gente diferente comotiene Valls, la ciudad tiene un ADN cultural de hace muchos años y las Decennals son esta expresión», manifiesta.
En este sentido, Bertran reivindica que Valls ha celebrado las Decennals en años tantoo más complicados que los actuales. El año 1881 en plena Guerra del Francés se pospusieron al mes de diciembre. Asimismo, recuerda que las fiestas de los años 1901, 1911 y 1921 los Xiquets de Valls se encontraban en una situación de decadencia y, aún así, subraya, se celebraron. «En las fotografías se ve que hicieron castells de 6 y que la plaza estaba llena, viviéndolo como nunca, y el año 1941 cuando había gente que estaba en una situación de absoluta tristeza con la ciudad todavía con muchos edificios derribados después de la Guerra Civil, los vallenses celebraron las Decennals; cada generación nos ha tocado vivir una fiesta, lo más importante es que a pesar de la pandemia intentamos ser el máximo de positivos y optimistas», concluye.
Declaradas Fiesta Patrimonial de Interés Nacional en el 2010
Desde finales del siglo XVIII, concretamente desde el año 1791, Valls celebra estas fiestas en honor a la Mare de Déu de la Candela, patrona de la ciudad. Son unas de las pocas fiestas populares de Cataluña y del estado español que tienen lugar con esta periodicidad decenal. Declaradas Fiesta Patrimonial de Interés Nacional en el 2010, el espíritu histórico de la celebración queda marcado en el mismo carácter de estas, que son motivo de recuperación y creación de elementos patrimoniales vallenses.
Este año, las fiestas conmemorarán el centenario de las primeras luminarias eléctricas con el espectáculo inaugural Omega, las ya tradicionales ornamentaciones de luz de gran formato en el centro histórico y el impactante mapping Candela'm, quese proyectará sobre la iglesia de Sant Joan Baptista y el campanario de Valls. Además, en el marco de la recuperación patrimonial destaca la reintroducción del Ballde Cavallets, una representación de calle documentada en el siglo XVIII. Las fiestas, que se celebrarán del 28 de enero al 6 de febrero, tienen un presupuesto de más de 3 millones de euros.