La playa Llarga de Salou ya dispone de un nuevo mirador, a unos 30 metros sobre el mar

El alcalde de Salou, Pere Granados, visitó el viernes el nuevo mirador con voladizo de la playa Llarga, una infraestructura turística, en este caso, a unos 30 metros por encima del nivel del mar, que permite admirar el paisaje, y a la cual ya se puede acceder, aunque todavía se trabaja con el fin de mejorar los accesos, para que la gente pueda llegar con más comodidad.

Este mirador forma parte de una primera fase de obras en la zona, que incluirá dos miradores más; y un parque con vistas al mar, que se construirá en la segunda fase, y que tendrá unos 15.000 metros cuadrados, aproximadamente.

Según ha anunciado Pere Granados, «el proyecto estará totalmente acabado entre finales de este 2022 y principios de 2023».

Hay que decir que por todos los alrededores de los miradores de playa Larga «se plantará vegetación autóctona y será un polo de atracción para residentes y visitantes, para pasear, hacer senderismo y disfrutar del magnífico paisaje litoral, fauna y vegetación de la zona».

En este sentido, desde la parte alta de la playa Larga hasta llegar al mar, se potenciará un recorrido, a través del cual se podrá disfrutar de una flora que ofrezca una coloración variada durante todo el año, y con un extenso abanico aromático, siempre, de especies adaptadas a la primera línea de mar.

También, desde la parte alta de la playa Llarga (al final de la calle Brussel·les) se enlazarán los márgenes del antiguo Càmping Platja Llarga, formando todo un paseo y el nuevo parque proyectado, para que las personas puedan disfrutar del paisaje natural, delante del mar.

Toda esta nueva zona se iluminará con luces solares autónomas. El presupuesto del proyecto es de unos 300.000 €.