Sociedad
Hasta 46 internos se han suicidado en las prisiones catalanas los últimos cinco años, uno en el Catllar
El 36% de los reclusos han entrado en algún departamento de aislamiento con una media de estancia de once días
Hasta 46 internos se han suicidado en los centros penitenciarios catalanes en los últimos cinco años, 16 de los cuales durante el aislamiento en el departamento especial de régimen cerrado (DERT). El método utilizado ha sido el de colgarse para morir por asfixia, excepto un caso en que la muerte tuvo lugar por la precipitación cuando el preso estaba fuera del centro. Son datos facilitados por la consellera de Justícia, Lourdes Ciuró, en respuesta escrita a preguntas parlamentarias. Según la misma información, han entrado en alguno de los DERT y departamento de sancionados (DS) 11.198 personas internas, de las 31.031 que han pasado por las prisiones entre el 2017 y el 2021.
Es decir, el 36% de los reclusos han entrado en algún departamento de aislamiento en estos años. La estancia media por persona interna en régimen cerrado en este periodo es de once días, si bien más de 2.000 han estado quince días o más seguidos.
Con respecto a las autolesiones producidas en los DERT han sido 1.169 en total. Con respecto a las cifras de las contenciones mecánicas en el interior de estos departamentos, se han producido 1.341 en los últimos cinco años. La duración media de las contenciones fue de 6,2 horas, con el extremo de 13 horas de media en Brians 1, que también es el centro que registra un mayor número de internos inmovilizados más de una vez (44).
Brians 1: el centro con más suicidios
Según los datos desglosadas, del total de suicidios de internos registrados, 8 fueron en 2017; 8 en 2018; 7 en 2019; 11 en 2020; y 1 en 2022. Por prisiones, la que acumula más suicidios desde el 2017 es Brians 1 (19), seguido de Brians 2 (6) y Quatre Camins (6) y Puig de les Basses (5). El resto son en centros clasificados como la prisión de Hombres Barcelona (1), Centre Obert (2), Dones (2), Joves (2), Ponent (1), Tarragona (1), Lledoners (1).
Por sexo, 39 fueron suicidios de hombres y 7 de mujeres. La edad media de los hombres en el momento del suicidio era de 41,7 años, mientras que en el caso de las mujeres era de 33 años.
Los centros penitenciarios (CP) de Brians 1 y 2 son los que registran un mayor número de internos que han pasado por el DERT entre en el 2017 y el 2021, 2.032 y 2.259 respectivamente. Después hay Quatre Camins (1.903), CP de Ponent (1.219), CP Mas d'Enric (892), CP de Puig de les Basses (889), CP de Joves (879), CP de Lledoners (828) y CP de Dones (297). En los casos de Brians 2 y Quatre Camins las cifras incluyen también los ingresos en el departamento de sancionados (DS).
De los 16 suicidios que tuvieron lugar durante la estancia en el DERT o en el DS, el preso que hacía más días que se encontraba en este régimen es el de un hombre que estuvo tres meses y seis días. Fue el año 2019 en el CP de Joves y el motivo del ingreso se refiere al artículo 10. Según el artículo 10 de la ley penitenciaria, se prevé el cumplimiento de régimen cerrado o departamentos especiales para los penados calificados de «peligrosidad extrema» o para casos de inadaptación a los regímenes abierto y ordinario, determinados por «causas objetivas» en una resolución motivada.
Por duración de la estancia, sigue este caso el de un hombre que se privó 51 días en el DERT de Ponent en 2021, también por aplicación del artículo 10, y el de otro hombre que pasó 29 días en régimen cerrado en Brians 1 en 2019 por primer grado.
Del resto de suicidios registrados, 2 estuvieron en el DERT entre siete y ocho días y 8 hacía entre uno y cinco días que estaban. En la mayoría de casos el motivo del ingreso en régimen cerrado era aislamiento «provisional».
Protocolo de prevención del suicidio
En la misma respuesta por escrito de la consellera Ciuró, publicada en el Boletín Oficial del Parlament de Catalunya (BOPC), también se explica que en los centros penitenciarios se trabaja la prevención de los suicidios a través de un programa marco aprobado en 2019 y revisado en 2021. El programa, se detalla, incide en la importancia de la detección y prevé un procedimiento en que cualquier profesional pueda identificar el riesgo de suicidio por cualquier vía.
En concreto, se prevén tres momentos clave: el del ingreso, el del internamiento y el de traslados. Además, cualquier detección o sospecha de riesgo se tiene que notificar verbalmente y por escrito al jefe de servicios del centro penitenciario, que es quien tiene que adoptar las medidas preventivas adecuadas y lo tiene que notificar al director y a los servicios sanitarios precisamente para activar el programa.
De acuerdo con los datos que constan en el BOPC, en 2020 se hicieron 411 activaciones del protocolo de prevención del suicidio y en 2021 se hicieron 493. En los centros donde se han hecho más activaciones en estos últimos dos años es en Brians 1 (205) y en Brians 2 (181). En Quatre Camins fueron 117.