«De pequeño ya sentía una gran empatía con Sant Jordi, es el primer superhéroe»

—¿Cómo surgió la idea de estirar el hilo de una leyenda de tanta envergadura en Cataluña? —En este país, a los niños, desde bien pequeños, les explican la leyenda de Sant Jordi. Yo, que además me llamo Jordi, sentía una total empatía con el caballero, considero que es el primer superhéroe. Ya de mayor, cuando estudiaba Historia enla universidad, hice una tesis sobre mito y leyenda, y me encontré con una frase que decía que toda leyenda tiene una historia detrás. Así me picó el gusanillo.

—¿Y cómo encontraste el nexo que te permitiera ligar realidad histórica y leyenda?

—Partí de los cinco iconos de la leyenda, que son Sant Jordi, el dragón, la princesa, las murallas de Montblanc y la rosa. Después, encontré que en el año 1366 las Compañías Blancas, que son una compañía de mercenarios que participan en la Guerra de los Cien años, llegan a Montblanc. Y, casualmente, uno de sus caudillos, denominado Calveley, llevael dragón de Wessex en elpecho. Además, este hombre muere un 23 de abril.

—Y aquí se hizo la luz.

—Sí, porque en aquel hecho Montblanc no sufrió ninguna violencia, el pueblo se rindió, y debieron entregar alguna cosa a cambio. Como historiador, hay una pared que no puedo atravesar, pero como novelista tengo un universo entero por recorrer. Que secuestren a la hija de un noble y un grupo de hombres vaya a rescatarla ha pasado mil veces enla historia. Aquí es donde arrancó el tema.

—Y al final todo cuadró. ¿Cómo es el trabajo de escribir un libro como este?

—Hay una parte muy grande de investigación, que me gusta muchísimo, disfruto tanto escribiendo como investigando. En este caso, fueron once meses de investigación, y tres de escritura. Enla novela quizás sólo acaba saliendo un 15 o 20% de lo que he investigado, pero al final cuadra todo.

—La historia transcurre por escenarios asociados a la leyenda, como la villa de Montblanc, pero también por lugares como la Mussara o Siurana.

—Conocía los mitos de estos lugares, tanto el de la Reina mora de Siurana como el de la niebla de la Mussara, que hace desaparecer a la gente, y me encajaban mucho. Pienso que los mitos y leyendas, cuanto más ligados estén, más carácter otorgan al territorio.

—La historia de La rosa y la creu reproduce la leyenda clásica de Sant Jordi, pero con una licencia final, que empodera la doncella que tiene que ser rescatada.

—Antes de empezar el libro me vino una escena a la cabeza: un bebé que muere desangrado cerca de un río, Sant Jordi a punto de morir y la princesa que mata al dragón por la espalda. En mis novelas dominan mucholas mujeres, a veces demasiado y todo, se me escapan de las manos. Las mujeres tenéis tanta potencia, además de la maternidad, una gran polivalencia y la capacidad de ver las cosas de manera diferente, que si les doy un poco de fuerza, se lo comen todo. En esta ocasión me he frenado un poco con Marina, la protagonista femenina, porquesi no, Robert, que es el protagonista masculino, se hubiera quedado en nada.

—Desde la primera página, el libro tiene un ritmo trepidante que engancha muchísimo. Es casi como estar viendo una película.

—Sí, me lo han comentado otros lectores. Me obsesiona que la trama tenga mucha fluidez y potencia, y que este nivel no baje. El libro empieza de una manera muy bestia, después se convierte en una investigación con un poco de misterio, hasta que en la parte final los capítulos son más cortos, con frases menos largas y verbos más contundentes, porque pasan muchas cosas.

—Como también pasa después de ver una buena película, comolectora ya pienso en cuál será tu siguiente novela. ¿Sabes dónde lo ambientarás?

—He presentado varios proyectos a la editorial, entre los cuales hay el de hacer una novela sobre la Tarragona post romana, cuando queda casi deshabitada. Encuentro que es una etapa interesantísima, y explicarlo es un reto. Y, a mí, me van los retos.