Sociedad
De Alforja en Margalef con un rebaño de 120 cabras, la trashumancia para recuperar los antiguos caminos ganaderos
Hace tres años que Daniel Giraldo trabaja para consolidar un corredor biológico en el Parque Natural del Montsant
De Alforja en Margalef por antiguos caminos ganaderos. Es la ruta que este viernes ha iniciado el rebaño de cabras del pastor Daniel Giraldo y que se alargará hasta el 1 de junio. Acompañado por familiares y amigos, Giraldo llevaráel ganado a pastos más altos y verdes para pasar el verano. Se trata de una trashumancia que se repite dos veces al año y que entre otros objetivos, pretende consolidar un corredor biológico en el Parque Natural del Montsant. Hace tres años que el pastor trabaja con el parque y ayuda a gestionar el entorno forestal a través de los animales. Es uno de los pocos pastores activos que quedan en el Campde Tarragona con un rebaño trashumante de leche. En este movimiento estacional abren la puerta a la población para conocer el oficio y reivindicarlo.
El recorrido entre Alforja -en el Baix Camp- y Margalef -en el Priorat- se ha escogido a partir de antiguos caminos ganaderos que con el paso de los años han quedado relegados en un segundo término. Este sábado, los animales pasarán por la carena del Molló y el camino entre Reus y Lleida hasta llegar al pantano de Siurana. A partir de este domingo, los animales enfilaránhacia Albarca, continuarán por el Grado Mayor y seguirán la carena hasta llegar a Margalef. Según explica uno de los integrantes del grupo de trashumancia, Joan Rovira, el Campde Tarragona fue un cruce ganadero donde iban rebaños provenientes de otros puntos del país, como es el caso de los Pirineos. Hoy en día, la presencia de rebaños en estos caminos es minoritaria y acciones como la de Giraldo permiten hacer una gestión forestal del entorno y mantener limpio el sotobosque.
Beneficios parala flora y la fauna del entorno
La iniciativa tiene varios objetivos, entre los cuales destaca la voluntad de recuperar y consolidar el corredor biológico de la sierra del Montsant. A través de un acuerdo firmado entre el Parque Natural del Montsant y el pastor Daniel Giraldo, el rebaño puede atravesar la zona y proporcionar una serie de beneficios tanto parala flora como parala fauna. Es un ejemplo el traslado de semillas de una montaña en otra a través del pelo o los excrementos de las cabras o la proliferación de pequeños animalillos que se aprovechan de la presencia de las 118 cabezas de ganado. En esta línea, Giraldo y sus acompañantes preparan un inventario de herbáceas que crecen en pastos que han dejado de ser frecuentados por animales como caballos, mulas o asnos. A partir de este documento, quieren promocionar que se recuperen estos pastos para mejorar la biodiversidad de ciertos entornos.
La trashumancia también permite a sus impulsores dar a conocer el oficio a la sociedad en general y al mismo tiempo, reivindicarlo. Actualmente, Giraldo es uno de los pocos pastores en activo del Campde Tarragona que dos veces al año traslada su ganado de un punto a otro. El pastor considera que las administraciones superiores no ponen facilidades a la hora de establecer nuevos rebaños que aseguren el relevogeneracional y critica que la actividad ganadera convencional se basa en la burocracia, sin respetar los «tiempos naturales» de los animales. Giraldo ha defendido que más allá del oficio, el trabajo de pastor «es un estilo de vida» y ha lamentado a la ACN que la gestión forestal podría ser más sostenible si no se pusieran tantos palos en las ruedas a la actividad.
Un rebaño de 118 cabras y dos cabritos recién nacidos
Dos características que diferencian las cabras de Alforja es que se trata de un rebaño de leche, el cual cada mañana tiene que ser ordeñado y, por otra parte, que cada noche duermen en uno cerrado para evitar que se escapen y se alejen del pastor. Durante la primera jornada de trashumancia de este año, dos de las cabras del rebaño de Giraldo han parido cabritos. Los integrantes más jóvenes del grupo que acompaña al pastor han sido los encargados de poner nombre en las dos hembras, Crispy Chicken i Tarongeta. Con pocas horas de vida, los animales no han podido seguir la ruta del resto de ganado y han sido transportadas a hombros. Por el contrario, en otoño ya estarán plenamente preparadas para volver a Alforja con el resto del rebaño.