Castells
La falta de relevo en las colles castelleres marca la reanudación
La covid-19 dificulta el retorno de algunos de sus miembros y también falta la participación de niños
Los castells volverán a las plazas este 2022 después de dos años de dificultades por la pandemia. Sobre el papel, el número de colles se mantiene estable con un centenar de activas, pero todo hace pensar que la pandemia les pasará factura. Según la Coordinadora de Colles Castelleres de Catalunya, hay una quincena que tendrán dificultades para hacer actuaciones pero todavía es pronto para hablar de disoluciones. Entre los retos que tienen sobre la mesa, las colles destacan la falta de un relevo para los niños y la dificultades para recuperar todos los miembros que tenían antes de la covid.
La radiografía definitiva del hecho casteller llegará durante el Concurs de Tarragona, que vuelve en octubre después de cuatro años. La cifra oficial de colles es ahora mismo de 104, tres más de las que había antes de la pandemia, con la incorporación de los Xiquets de Torredembarra, los Castellers del Foix-Cubelles y la Colla Castellera de Vacarisses. De estas, 82 son consideradas convencionales, 12 son universitarias y 10 en formación –de las cuales, dos en cuestión de días podrían pasar a pleno derecho. Para la Coordinadora de Colles Castelleres de Catalunya (CCCC), sin embargo, la importancia no radica tanto en el número oficial de colles, sino en la participación de los castellers en las actuaciones y la realidad de cada colla en la post-pandemia. «El panorama es de incertidumbre y la sensación es que ha disminuido un poco, si bien todavía es pronto para valorarlo», apunta Joan Ibarra, presidente de la CCCC y miembro de la Colla Vella de Valls. El hecho casteller, liberado de restricciones, ve el Concurs de Castells de Tarragona como una buena prueba de fuego para tomar el pulso al colectivo y calibrar el estado de forma de las colles. «Soy optimista y creo que los castells grandes volverán a llegar, se trata de mantener la masa social que teníamos en el 2019. Es más importante tener un buen grosor de collas que hacer el 3 de 10, que también lo es, de importante», concluye.
En Valls, la temporada arranca tradicionalmente por Sant Joan, pero la Colla Joves dels Xiquets de Valls ya se ha estrenado, como otras colles, con castells de ocho. Intensificar los ensayos es la clave para recuperar el estado de forma de hace dos años atrás, según explica la presidenta de la Joves, Montse Solé. «A pesar de los obstáculos de la pandemia, hemos intentado mantener viva la llama een la colla para evitar que los castellers se desengancharan», añade. Además, esta temporada se está trabajando intensamente con los niños, uno de los sectores en que se ha notado más el cambio a causa de las nuevas posiciones que tienen que ocupar. Aquellos pequeños que hacían de acotxadors o enxanetas ahora tienen que recolocarse en posiciones del tronco. «Somos conscientes de que, paso a paso, con horas de trabajo, de ensayo y constancia para coger confianza, los resultados en plaza llegarán seguro», afirma Montse Solé. Según la presidenta de la Joves, aparte de las collas, habrá que constatar que la gente tiene ganas de volver a las plazas.