Tráfico
Trànsit dispondrá de un servicio de grúas para retirar los vehículos accidentados en la AP-7
El director del SCT dice que la vía «ha tocado techo» y que el modelo de movilidad «no da salida» a los trayectos a zonas de vacaciones
El director del Servei Català de Trànsit (SCT), Ramon Lamiel, ha reconocido este martes enRAC1 que el modelo de movilidad actual «no da salida» a los trayectos «de dispersión del área metropolitana en zonas de vacaciones» y ha afirmado que la AP-7 «ha tocado techo» los fines de semana, después de que se hayan registrado varias colas durante el puente de la segunda Pascua sobre todo en esta vía. Lamiel ha puntualizado que el responsable de la infraestructura es el Estado por ser el titular y que el SCT toma medidas en la gestión del tráfico para reducir la siniestralidad y atenuar las colas. En este sentido, Trànsit quiere poner en marcha un sistema de grúas para retirar los vehículos accidentados cuando la del seguro se retrase para evitar más congestión.
Lamiel ha admitido que hay un «problema de movilidad en general» en Cataluña los fines de semana y también los días laborables, cuando se producen 126 kilómetros de retención de media, ha indicado. El director del SCT ha pedido promover «alternativas a la movilidad» en transporte público y ha puesto énfasis en el autobús.
Con respecto a los fines de semana, ha señalado que los niveles de retención son «los mismos» que en el 2019 en el conjunto de Cataluña. «No estamos peor», ha respondido, preguntado por las colas registradas en el puente de la segunda Pascua, sobre todo en la AP-7, tanto en la operación salida como en la vuelta.
Sobre las medidas concretas que está estudiando, especialmente pensando en la AP-7, Lamiel ha afirmado que se producen «demoras» para retirar los vehículos accidentados que provocan más retenciones. El director de Trànsit ha anunciado que «en breve» pondrán en marcha un sistema de grúas para retirar los vehículos de accidentes sin víctimas mortales en caso de que la del seguro se retrase.
Otra medida que están explorando es abrir un carril adicional en la AP-7 norte, de la misma manera que hacen en la AP-7 sur entre Vilafranca y El Papiol o en la C-32 en el Maresme. Según Lamiel, esta medida «ayuda bastante» en las operaciones retorno. En el caso de la AP-7 norte, todavía no han podido habilitar este carril adicional desde que se liberó el peaje, porque no han encontrado el espacio para cerrarlo con seguridad.
Sobre la demanda en el Estado para limitar la velocidad a 110 km/h en la AP-7 ante la alta siniestralidad en la vía, Lamiel ha expuesto que el 55% de los accidentes en esta carretera son por persecución y que con esta reducción de 10 km/h se ganarían 25 metros en el frenazo, una distancia «considerable» para evitar accidentes, ha defendido.