El Seprona realiza la ruta del Niu de l'Àliga para detectar posibles problemas medioambientales
Los agentes se han entrevistado con numeros senderistas para sensibilizar al turismo que visita la zona
El Seprona en colaboración con agentes de la Vigilancia Municipal del Ayuntamiento de Alcover hicieron la ruta senderista que va hacia el Niu de l'Àliga con elobjetivo de abordar los problemas detectados relacionados con el desarrollo de actividades de ocio en diferentes parajes naturales de la localidad.
El municipio de Alcover cuenta con cinco espacios de acentuado valor natural y paisajístico en el Valle del Rio Glorieta, como son el Niu de l'Àliga, la Font Fresca, el Calvari, l'Ermita de les Virtuts y les Escales de la Glòria. El Niu de l'Àliga, es uno de los saltos de agua más populares de la comarca del Alt Camp; es una piscina natural alimentada por el río Glorieta, afluente del Francolí, que atraviesa las poblaciones vecinas de Mont-ral, Vilallonga y El Rourell. Su popularidad se debe, entre otras, a la cercanía del área recreativa del Mas de Forés, zona para picnic y equipada con parking. Este punto se ha convertido en una excursión frecuentada por turistas, aumentando considerablemente el riesgo de que se originen incidentes medioambientales, tales como incendios o acumulaciones de basura.
El área de Mas de Forés es una zona muy concurrida y muy sensible y para llegar a ella desde Alcover es necesario seguir la llamada carretera del Remei, dejando atrás la ermita del mismo nombre. Antes se permitía aparcar en la ermita, pero en la actualidad y como medida protectora dicho aparcamiento es de pago; aún así, es una zona muy turística y muy frecuentada por senderistas.
Con el objeto de proteger aún más la zona, el Seprona ha llevado a cabo una ruta senderista a pié, desde la Ermita del Remei hasta el Niu de l'Áliga, a fin de intentar minimizar en lo posible los riesgos de incendio y de controlar el uso que hacen del territorio los senderistas.
Si bien el senderista es sensible a la protección del medio ambiente, en ocasiones la afluencia masiva de turistas, hace que por negligencia se puedan provocar incendios que se pueden propagar, o que se puedan abandonar basuras y desperdicios que afectan a la zona.
La forma en que se ha desarrollado esta actividad es pionera, y no se ha realizado hasta ahora actividad similar, ya que los agentes de la Guardia Cvil han realizado su servicio como cualquier otro senderista, a pié y sin apoyo de vehículos a motor, coordinando la actividad con el Ayuntamiento de Alcover.
La función principal ha sido la sensibilización del turismo en la zona, aunque se ha advertido a alguna persona, atendiendo a la importancia o peligro de las acciones que han observado los agentes, recibiendo diversa información de otros senderistas, relacionada con irregularidades en la zona.