Fiesta
Vila-seca se despide de la Fiesta Mayor después de dos semanas de actos
El tradicional Castillo de Fuegos cerró la fiesta
La Fiesta Mayor de Verano en Vilaseca llegó ayer a su punto y final, después de casi dos semanas de actos, primero en la Pineda en honor a la festividad de Sant Jaume, y después en Vila-seca en conmemoración a la invención del Cos de Sant Esteve.
Los tamborileros del Ball de Diables fueron ayer los encargados de recorrer el centro histórico con las matinades tronades. A media mañana se celebró la misa mayor y, por la tarde, se representó el Baile de Sant Esteve en la plaza de la Iglesia. Además, tuvo lugar la entrega de los premios del concurso de decoración de balcones y calles, un acto que fue amenizado con las Havaneres en femenícon Neus Mar.
Por la noche, volvió a abrir el Espacio Chill out en el jardín de la Biblioteca y, seguidamente, a las 22.15 h., salió el Pasacalle de Trabucaires del Comú desde el Casal Clàudia Padró. Más tarde, el Ball de Diables se concentró en la calle de Sant Pere para iniciar el Correfoc desde la plaza de los Països Catalans hasta la calle Joan Fuster i Ortells donde hicieron la actuación de lucimiento final.
La Fiesta Mayor se despidió hasta el próximo año con el tradicional gran Castillo de Fuegos Artificiales a cargo de Coeters Dragon.