La sequía hará que la vendimia sea un 25% menor que otros años

Unió de Pagesos (UP) prevé que la vendimia de este año, que ha empezado hace unos días en Cataluña, será al menos un 25% menor que la media de otros años, por la sequía que ha sufrido gran parte del territorio y las temperaturas extremadamente altas, cuestiones que han hecho adelantar la cosecha en algunas zonas a finales de julio o principio de agosto. Otro factor que marcará las condiciones de la cosecha también será el estancamiento de precios de la uva y el vino que las empresas compradoras pagan a las viticultoras y viticultores. Además, el elevado incremento de costes de producción (gasóleo, de fitosanitarios y fertilizantes) impide que los precios puedan ser compensados.

En el Alt Penedès, el aumento de temperatura ha hecho que ya se estén recogiendo variedades tempranas como chardonnay, pinot noir y muscat y se esté a punto a recoger merlot, tempranillo y macabeo, aunque con producciones más bajas, especialmente en las zonas donde el agua ha sido más escasa.

Con respecto a la DOQ Priorat, ya se ha empezado a vendimiar uva blanca en la parte baja de la comarca, en Bellmunt y el Molar. En esta zona, el sindicato destaca la resistencia de algunas bodegas a subir el precio de la uva, aunque el Consejo Regulador de la DO ha pedido un aumento.

En el Alt Camp, ya hace días que se está recogiendo chardonnay, pinot y macabeo y se ha empezado a vendimiar tempranillo. En general, se ha cogido entre un 25% y 50% menos respecto a un año normal. El macabeo empieza a disminuir en muchos lugares de la comarca. En la zona del Garraf, de momento la cosecha también es muy justa, entre un 30% y un 40% menos que un año normal.

A pesar de la afectación de la sequía y las altas temperaturas, han acelerado la madurez del fruto, Unió de Pagesos destaca que la falta de lluvias también ha permitido la ausencia de hongos. Hay que recordar que los últimos dos años han sido marcados por una reducción de la vendimia, el 2020 a causa del mildiu, y el 2021, por la sequía. Con respecto a los bajos precios que se están pagando en origen, el sindicato considera que ante esta situación de mercado del vino es injustificado que las bodegas paguen la uva y el vino en torno a los 0,40 euros el kilogramo. Hace falta que el precio que se paga en Cataluña, que casi en su totalidad se comercializa bajo el amparo de una de las 12 denominaciones de origen que están presentes, valore la calidad que exigen estas denominaciones, tanto con respecto a rendimientos productivos, como el grado y la calidad organoléptica. Además, el extraordinario aumento de costes de producción hacen insostenible los precios que se están pagando por la uva.

Unió de Pagesos pide a todos los operadores del sector en Cataluña que trabajen para diferenciar su producto y que se tengan en cuenta los incrementos de los costes de producción, así como la bajada de la producción, y que apuesten por la personalidad de su producción. Hace falta que se responsabilicen de su contribución por la estabilidad de todo el sector vitivinícola, con el fomento de los contratos plurianuales, con precios conocidos e incentiva a medio y a largo plazo, y que permitan así la innovación y la actualización de las explotaciones vitícolas. El sindicato recuerda la obligación de formalizar contratos por escrito de compra-venta de uva con el establecimiento de cualidades, precios y condiciones concretas, y la obligación de las bodegas de pagar la uva a los viticultores a 30 días según la actual ley de morosidad. Unió de Pagesos seguirá denunciando durante esta vendimia los posibles abusos en el ámbito de la Ley de la Cadena Alimenticia.