Sucesos
Desocupan quince pisos del edificio de la plaza Martorell de Roda de Berà
Con mucha presencia policial, el desalojo se ha realizado sin ningún incidente
Después de muchos meses de lucha, el Ayuntamiento de Roda de Berà ha conseguido desalojar esta mañana los quince pisos del edificio número 2 de la plaza Martorell. En la actuación han participado diez agentes de la Policía Local de Roda de Berà, dos patrullas de orden público de Mossos d'Esquadra, y dos más de seguridad ciudadana, dando apoyo, a la ejecución del desalojo.
Este ha sido el primero que efectúan con el nuevo Protocolo para desahucios y ocupaciones, puesto en marcha recientemente, que incorpora medidas de protección para mejorar la atención a las personas vulnerables. El desalojo, que se ha desarrollado sin incidentes, fue autorizado por el Juzgado Contencioso Administrativo número 2 de Tarragona alegando motivos de seguridad y salubridad. La sentencia de ejecución fue notificada la semana pasada a los afectados, que desde hacía tiempo ocupaban de forma irregular este edificio, y vivían en una situación de insalubridad y poniendo en peligro el vecindario próximo debido a las conexiones ilegales.
Durante mucho tiempo han sido continúas las incidencias que se han producido en el edificio, provocando problemas de inseguridad en la zona norte del núcleo urbano. Las conexiones irregulares en la red eléctrica habían causado muchos y diferentes cortes de luz en el barrio por sobrecarga y exceso de consumo, y los vecinos y vecinas han sufrido problemas de salubridad y altercados.
Recogidas las quejas vecinales, los técnicos municipales realizaron una inspección a finales del pasado mes de julio, constatando que el edificio no cumplía las condiciones de seguridad, salubridad y habitabilidad requeridas por la normativa vigente.
Todas las viviendas, a las que también les faltaba la cédula de habitabilidad, fueron declaradas inhabitables y el 17 de agosto se ordenó por resolución de alcaldía el desalojo de las viviendas, con un plazo de tres días para dar cumplimiento. Transcurridos estos días los ocupantes no dejaron el edificio, hecho por el que se resolvió una ejecución forzosa del desalojo, autorizada por el juez el 19 de octubre.
Una vez desalojado, el edificio ha quedado totalmente asegurado y cerrado, para evitar que nadie pueda acceder, y para que no ocurra un peligro para los vecinos y vecinas de las viviendas contiguas. La empresa suministradora de luz ha cortado el suministro y una empresa colaboradora se ha encargado de cortar el agua.
Tampoco existe ninguna posibilidad que nadie se pueda conectar de forma irregular al suministro de gas. También se han contratado los servicios externos de limpieza y de cerrajería. Todos los gastos derivados serán reclamados a las propiedades, dos particulares y un fondo buitre, que es propietario de trece de los quince pisos.
Durante esta semana, desde el Consejo Comarcal del Tarragonès se han reforzado con dos técnicos más los Servicios Sociales de Roda de Berà, para dar respuesta a las necesidades que pudieran surgir a consecuencia de la desocupación, aunque de las quince viviendas sólo dos familias son usuarias de Servicios Sociales.