Cultura
Ocho imágenes icónicas de la historia del arte, protagonistas del 23.º pesebre de arena del Pinar
El Ayuntamiento de Vila-seca calcula que más de 25.000 personas visitarán el conjunto escultórico
La historia del arte es la protagonista de la 23.ª edición del pesebre de arena de la playa La Pineda. En total, son ocho las esculturas que dan un repaso por las diferentes épocas que han marcado el camino de la humanidad desde la prehistoria hasta la actualidad.
Además, todas ellas se convierten, en sí mismas, en uno de los personajes que configuran el pesebre más tradicional, aunque han sido diversos los visitantes que este viernes no han adivinado cuál era la figura a la cual representaban. En este sentido, la concejala de Innovación y Turismo del Ayuntamiento de Vila-seca, Cristina Cid, ha remarcado la imporància, en la edición de este año, de «fijarse en los detalles». «El secreto del pesebre de este año es quedarse un rato y mirar con detalle todas las figuras», asegura Cid, a quien reconoce que este año es de los «más complicados» a la hora de averiguar en qué figura del pesebre tradicional representan cada una de las esculturas.
De hecho, han sido diversos los visitantes que estos viernes se han acercado a la playa del Pinar y miraban las obras sin entender muy bien su significado. Entre ellos, Esther García, una vecina de Reus, quien cree que las estructuras tendrían que ir acompañadas de una «pizca de información». Una demanda que ha sido escuchada por la concejala de Innovación y Turismo del Ayuntamiento de Vila-seca, quienafirma que «es un tema a tener en cuenta de cara el próximo año».
Para otros visitantes, como Antonio Martín, la simbología es secundaria, ya que las esculturas en sí mismas son «muy bonitas y originales». Martín visita el pesebre de arena del Pinar con su mujer, cada año, y asegura que no deja de sorprenderlos.
Justamente, la continua originalidad de este conjunto escultórico, tan arraigado en el municipio de Vila-seca, es lo que más destaca a la concejala de Turismo. Asegura que «todo el mundo está acostumbrado a ver los pesebres más tradicionales», pero el del Pinar es «innovador» y «cada año aporta un nuevo secretismo». Un aliciente que es, según Cid, el que hace que cada año pasen por el pesebre de arena del Pinar más de 25.000 personas.