Economía
El CAT habría realizado un «fraccionamiento indebido» en la compra de material informático y maquinaria en el 2018
La Sindicatura de Cuentas remarca que la contració se hizo sin ningún procedimiento de publicidad y concurrencia
La Sindicatura de Cuentas de la Generalitat de Catalunya ha publicado un informe sobre el Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT), en la que constata un «fraccionamiento indebido» de contratos en el ejercicio del 2018. El órgano fiscalizador asegura que varios elementos de hardware y material informático se compraron «directamente» y «sin un procedimiento de publicidad y concurrencia, aunque en el caso de algunos proveedores se superaba el importe de la contratación menor». Según el escrito, esta incidencia estaría relacionada con la contratación separada de prestaciones que tendrían que haber sido «objeto de un único contrato».
En el informe, el órgano fiscalizador nombra otras incidencias. Entre ellas, asegura que el CAT no envió los contratos a la Sindicatura de Cuentas ni al Registro Público de Contratos, en contra de lo que dispone la normativa. Además, exponen que algunos de los contratos analizados superan el plazo de prórroga establecido por la normativa.
Por otra parte, la Sindicatura de Cuentas detecta que el CAT habría recaudado el canon por cuenta de la Generalitat y, por lo tanto, los ingresos por venta de agua «tendrían que estar minorados».
Finalmente, órgano fiscalizador insta en el CAT a modificar sus estatus para «conferir a este ente la naturaleza de consorcio». De esta manera el Consorcio de Aguas de Tarragona podría disponer de un «órgano interventor» y estaría «sujeto al cumplimiento de las obligaciones sobre la formación y la restitución de cuentas», así como a la «normativa de contratación y de retribuciones del personal aplicable a las entidades públicas».
En este sentido, la Sindicatura recuerda que los estatutos del CAT no se han actualizado desde 1985.