Medio ambiente
La ACA obliga a Tarragona, a Cambrils y a Salou a revisar el plan de la sequía
El porcentaje de uso de agua de pozo en caso de emergencia o el detalle de las medidas administrativas son algunos puntos a corregir
Tres municipios del Camp de Tarragona están obligados a revisar su Plan de Emergencia por sequía: Salou, Cambrils y Tarragona. Así lo ha informado la Agencia Catalana del Agua (ACA) después de revisar la documentación y determinar que es desfavorable en los casos mencionados.
Los parámetros a corregir son la descripción de acciones administrativas o el porcentaje de uso del agua de pozo en caso de emergencia, entre otros. El documento, obligatorio para los ayuntamientos de territorios de más de 20.000 habitantes, pretende definir las medidas específicas a aplicar en función de los diferentes escenarios de sequía, así como las características de la red de abastecimiento. En el caso de Tarragona, fuentes del consistorio señalan que la ACA indica que el plan «tiene muchas fortalezas» con base al «conocimiento esmerado de la situación del abastecimiento municipal».
No obstante, hace algunas enmiendas, una de las cuales es detallar más la descripción de las acciones encaminadas al despliegue de medidas de carácter administrativo, como pueden ser las actuaciones asociadas al seguimiento y control de un posible episodio de sequía o el establecimiento de sanciones. Al mismo tiempo, se solicita definir a los responsables organizativos especificando funciones y responsabilidades de cada uno.
Tarragona calcula que en dos meses tendrá el documento terminado y podrá volver a enviarlo. Las campañas de concienciación en la población, el control o las restricciones a los grandes consumidores y las acciones para reducir el consumo son algunas de las medidas que se podrían aplicar dependiendo del grado de afectación de la sequía.
La ACA también informó al Ayuntamiento de Cambrils sobre detalles a mejorar en su plan. A su vez, se trasladaron las prescripciones a Comaigua, la empresa encargada de la gestión del ciclo del agua en el municipio, que tendrá que ajustar el documento con la supervisión de la administración local.
Una de las indicaciones es «positiva», según consideran desde el Ayuntamiento, ya que la ACA expone que se puede ampliar del 10% al 20% el uso del agua de pozo en caso de emergencia. Al mismo tiempo, también comenta que se tiene que definir en metros cúbicos el agua de refuerzo que requeriría un episodio de sequía.
Con respecto a Salou, la ACA ha considerado desfavorable el plan porque se presentó conjuntamente con Vila-seca (que lo tiene en trámite), a través de la Mancomunidad Gestora de Recursos Hídricos. Sin embargo, la entidad pública respondió que cada municipio tenía que tener uno propio.
Delante de este escenario, Salou redactó un nuevo plan de emergencia exclusivo, que ya se ha enviado a la ACA, con la regulación y el detalle de las medidas incluidas en las recomendaciones del Plan Especial de Sequía (PES) en los diferentes estados de prealerta, alerta, excepcionalidad y emergencia.
El PES es la disposición normativa que tiene la finalidad de asegurar el abastecimiento de agua a la población minimizando los efectos sobre el estado de los recursos hídricos y el impacto económico sobre las actividades que requieren el agua como factor de producción. El resto de municipios de más de 20.000 habitantes del Camp de Tarragona obligados a tener un plan de emergencia son Reus, con informe favorable, y Valls, en trámite.
Tal como marca la Generalitat, las administraciones locales tienen que dar a conocer a la ciudadanía las medidas que afectan o se tienen que adoptar en cada escenario planteado. Algunas de estas medidas, depende de la envergadura de la sequía, pueden ser reducciones de presión o, incluso, la suspensión temporal en la prestación del servicio de abastecimiento.