Agricultura
Empiezan a aplicar un producto para que los corzos no se acerquen a la viña y se la coman
La prueba piloto se lleva a cabo en el Baix Penedès, el Alt Camp y el Priorat para controlar las especies cinegéticas
Empiezan a aplicar un producto para que los corzos no se acerquen a la viña y se la coman
El Departamento de Acción Climática ha iniciado un ensayo con un producto natural que contiene grasa de oveja para evitar que los corzos se acerquen a la viña y se la coman. De momento, se ha implementado esta técnica en tres fincas del Priorat, el Alt Camp y el Baix Penedès. La acción se enmarca en el Plan estratégico de prevención de daños y control sanitario de especies cinegéticas del Departamento de Acción climática.
La directora de los Servicios Territoriales en Tarragona, Glòria Guash, ha explicado que con esta medida quieren «alejar» el corzo de la viña para llegar a la vendimia con un producto «de calidad y con mucha cantidad». Este fitosanitario ya se ha testado en Francia con buenos resultados de control biológico.
El producto repele a los animales tanto a nivel olfativo como gustativo, según ha explicado la jefa de sección de especies cinegéticas del Departamento de Acción Climática en Tarragona. Una vez pasados 30 días de la primera aplicación, técnicos de las Agrupaciones de Defensa Vegetal (ADV) repetirán el proceso y valorarán los resultados.
Acción Climática quiere evitar que este cérvido se expanda ya que desde el 2015 el número ha crecido exponencialmente. Actualmente, se calcula que en Cataluña hay 40.000 ejemplares y puede ser un agravio para la agricultura. Guasch ha insistido en la necesidad de que las explotaciones «sean viables» y ha remarcado el papel del campesinado, por ejemplo, a la hora de hacer frente a los incendios en un contexto de «sequía extrema» y de «custodiar el territorio».
350 corzos abatidos en el Priorat
En el 2018 se puso en marcha un plano piloto para prevenir y mitigar los daños producidos por los corzos a las explotaciones vitivinícolas del Priorat. Se hizo conjuntamente con las administraciones locales y las sociedades de cazadores. Gracias a este trabajo conjunto y a la reducción del periodo de veda, en la comarca se han pasado de abatir 150 a 350 corzos por término medio por temporada.
