Andreu busca revalidar la alcaldía de Montblanc con un nuevo partido

Josep Andreu, alcalde de Montblanc desde 2007, busca revalidar el cargo este 28-M al frente de un partido de nueva creación, Montblanc Progressa (MP), después de romper su histórica vinculación con ERC. Integrante de la Crida, Andreu rompió este mandato el carné por desavenencias con la cúpula del partido. Eso supuso la ruptura del equipo de gobierno y que el alcalde haya gobernado en minoría. Tanto Junts como ERC comparten línea roja y rechazan pactar con Andreu. Aparte de MP, Junts y ERC, también concurrirán en las próximas elecciones el PSC y 'Despertem poble'-FIC. Los alcaldables consideran que las mayorías absolutas son cosa del pasado y pronostican unos resultados que mostrarán la fragmentación política en la villa.

En los comicios del 26-M de 2019, Josep Andreu obtuvo siete de los trece concejales en juego bajo las siglas de Agrupament Catalanista de Montblanc (ACM), formación vinculada a ERC. Con aquella nueva mayoría absoluta, revalidó la alcaldía por cuarta vez consecutiva. A principios de mandato, Andreu tuvo que afrontar los graves daños derivados de los aguaceros de octubre de 2019, que dejaron una imagen devastadora en la Conca de Barberà. Entre las afectaciones más relevantes destacan la reconstrucción del emblemático Pont Vell, estructura medieval fechada del siglo XII, o el puente de Boloví.

Ahora bien, uno de los momentos más críticos de esta legislatura ha sido la ruptura del equipo de gobierno después de que el alcalde se hiciera militante de la Crida, movimiento liderado por el expresidente Carles Puigdemont. De hecho, se dio de baja del partido el 12 de febrero de 2020 después de 30 años de militancia. En abril del año siguiente, cuatro de sus exconcejales formaron grupo propio de ERC y en julio del mismo año se marcharon del gobierno municipal, formalizando así la ruptura. Desde entonces, Andreu ha gobernado con minoría, con cuatro concejales no adscritos y con el socialista Juanma Cabello.

Montblanc Progressa, el nuevo partido de Andreu

Después de la ruptura del grupo, Josep Andreu ha optado por constituir un nuevo partido, Montblanc Progressa (MP). Marià Gomis - secretario municipal hasta hace poco después del anuncio de la lista electoral -, Anna Lafebre, así como los actuales concejales Núria Besora y Santi Porta, acompañan a Andreu en las primeras posiciones de la candidatura. Con este equipo, el alcalde quiere volver a conseguir la alcaldía y también la mayoría absoluta que ha revalidado desde el 2007.

La nueva formación quiere dar continuidad a los proyectos puestos en marcha durante este mandato, como por ejemplo, la construcción del polígono industrial de CIMALSA (Centrals i Infraestructures per a la Mobilitat i les Activitats Logístiques). En esta nueva área se ubicará el segundo centro logístico de Bon Preu en Cataluña. Asimismo, Andreu saca pecho y remarca que tiene el apoyo del expresidente Puigdemont y de miembros de Junts como Jordi Turull. Afirma que está abierto a todos los pactos, aunque celebra que desde Junts per Montblanc cierren la puerta a negociar con él.

Junts y ERC aspiran a conseguir la alcaldía

Marc Vinya encabeza la candidatura de Junts per Montblanc por segunda vez. El año 2015 se presentó de número dos. El alcaldable ya había ocupado un cargo político anteriormente, ya que de 1999 al 2011 fue concejal en Prat del Comte (Terra Alta). En las pasadas elecciones, la formación mejoró sus resultados y pasó de dos a cinco concejales, alcanzando más de 1.350 votos. En estos comicios, hace tándem con Raquel Huguet, con quien comparte liderazgo, seguido por Gerard Ferré y Maria Cristina Molina en tercera y cuarta posición.

Su proyecto se basa en la mejora de los servicios del municipio y en las personas. Su voluntad es recuperar el centro de día, construir un hospital ligero como el de Cambrils, crear equipamientos culturales para las entidades o promover bonos comerciales para incentivar el comercio local - como ya han hecho Tarragona, Tortosa o Reus. Para Vinya, la prioridad son las personas y no los turistas. En cuanto a los pactos, el cabeza de lista de Junts tiene clarísimo el veto a la nueva formación de Andreu y defensa que no son la «marca blanca» de Montblanc Progressa. En cambio, se muestra abierto a confrontar programas y pactar con el resto de partidos.

Con respecto a ERC, Oriol Pallissó es el cabeza de lista. Se presenta por primera vez como alcaldable, aunque ha sido concejal desde el 2015 y, desde hace medio año, también es diputado en el Parlament de Catalunya. Entre su equipo se reúnen Carme Pallàs y Judit Pere Cantó, concejalas en este mandato. Los republicanos centran la campaña en los ejes de arraigo, bienestar y la transparencia y participación de la ciudadanía. Construir un nuevo jardín de infancia -porque el actual ha quedado pequeño-, asfaltar calles o crear un centro cultural para todas las entidades, son algunas de sus propuestas.

El republicano que fue compañero de Andreu y concejal en los pasados mandatos es escéptico con la proyección de nuevas viviendas a consecuencia de la instalación del centro logístico de Bon Preu en el municipio. Para Pallissó, la apertura del túnel del Coll de Lille sí que supondrá un cambio de paradigma para la villa. Confía plenamente en que se pueden convertir en la fuerza ganadora de la noche electoral y, así impulsar un cambio de era en la villa, el cual no pasa por pactar con el nuevo partido del alcalde. De hecho, subraya que el pacto es imposible después de la ruptura como grupo.

PSC confía en que el trabajo hecho en el gobierno se refleje en las urnas

Juanma Cabello vuelve a liderar al PSC y se presenta por segunda vez como cabeza de lista. En las elecciones de hace cuatro años, los socialistas fueron la tercera fuerza y consiguieron a un concejal que les permitió volver al consistorio. Ahora, después de entrar a formar parte del gobierno municipal, confía en que el trabajo hecho durante este último año y medio haya servido para posicionar el partido y les permita obtener unos buenos resultados electorales. Lo acompañan en las primeras posiciones de la candidatura Juan Molina, que repite de número dos, Raquel Castro y Adela Pardo.

Entre sus propuestas destacan mejorar la calidad de vida de los montblanquins a través de la creación de un local para la juventud, la proyección de un carril bici para mejorar la movilidad del municipio, el traslado de la estación de autobuses hacia una zona más céntrica o bien la construcción de una piscina cubierta. El socialista también considera relevante la apertura del túnel de Lila y el proyecto industrial de CIMALSA. A diferencia de otros candidatos, Cabello afirma que no tiene líneas rojas y que negociará con todos los partidos, ya que tanto en el consistorio como el Consejo Comarcal de la Conca de Barberà trabaja codo con codo con las formaciones de Andreu y ERC, respectivamente.

Finalmente, 'DESPERTEM, POBLE!- FIC' también concurre a los comicios del 28-M. Hace cuatro años, la FIC obtuvo 179 votos, pero perdió la representación que había alcanzado durante la noche electoral después de que se resolviera un error hecho en una mesa electoral durante el recuento. El cabeza de lista, Ramon de Domingo Iborra, explica que se presentan porque están cansados de los políticos que no hacen nada por la gente y, por eso, sostiene que su candidatura está conformada por dieciocho personas procedentes de las asociaciones locales.

La vivienda, la principal problemática

Todos los partidos coinciden en que la falta de vivienda en el municipio es una de las principales problemáticas a resolver. La mayoría de las formaciones proponen abrir líneas de ayudas para rehabilitar las viviendas en el casco antiguo y se muestran preocupados por los elevados precios del mercado inmobiliario tanto respecto a los precios de alquiler como a los de venta. Por ejemplo, Junts propone buscar alianzas con el INCASOL para construir un parque público y ERC apuesta por incentivar el alquiler de las 600 casas desocupadas en el centro. Aparte, y a excepción de Andreu, prácticamente todos los alcaldables consideran que se han gastado demasiados recursos en la conservación del patrimonio en los últimos años y afirman que no destinarán más dinero.