Economía
Tres cooperativas del Priorat se unen para hacer frente a la falta de relevo generacional y materias primas
El proyecto incluye desde un espacio para que los jóvenes prueben el oficio, hasta la creación de comunidades energéticas
Las cooperativas Falset-Marçà, Agrícola de Cabacés y Vinícola del Priorat se han aliado para luchar contra la falta de relevo generacional y de materias primas. Consideran que son los grandes retos de futuro y que suponen una gran amenaza para la continuidad del sector. Para hacerlo, han diseñado un proyecto que incluye desde un «espacio test», para que los más jóvenes puedan probar y evaluar la viabilidad de la actividad agrícola, hasta acciones promover sus productos. Además, elaborarán un estudio para analizar la rentabilidad de las parcelas y poder garantizar la resiliencia de los cultivos de oliva y uva. Esta colaboración también permitirá reducir costes de producción, crear comunidades energéticas o gestionar viviendas vacías.
La iniciativa de las tres cooperativas reúne seiscientos socios y agricultores de siete municipios del Priorat, es decir, el 25% de la comarca. Cultivan dos de los frutos estrella del Camp de Tarragona como son la uva y las olivas, materias primas, con que se elaboran algunas de las botellas de aceite de la DOP Siurana o de los vinos de la DOQ Priorat y DO Montsant, y suman una facturación anual de unos cinco millones de euros.
Los cooperativistas apuntan que, últimamente, el cambio climático ha provocado una reducción de los recursos en la zona y, con el objetivo de luchar contra esta carencia, las cooperativas de Falset-Marçà, Agrícola de Cabacés y Vinícola del Priorat iniciarán un estudio de rentabilidad de las parcelas agrarias. «Nos empieza a preocupar mucho la supervivencia de estos frutos en los próximos años», ha lamentado el gerente de la Cooperativa Falset-Marçà, Xavi Domènech, quien también ha subrayado la importancia de unir esfuerzos para poder hacer frente a los retos comunes del territorio».
Oportunidad para probar el oficio
Otra de las problemáticas compartidas es la falta de relevo generacional. El vicepresidente de la Cooperativa Falset-Marçà, Robert Perelló, ha destacado la relevancia de los nuevos «espacios test», una iniciativa pensada para que los jóvenes puedan probar el oficio antes de embarcarse. De hecho, Perelló ha asegurado que son muchos los que quieren trabajar la tierra, pero la falta de recursos o el miedo a perderlo todo les hace echarse hacia atrás. Sin socios, sin embargo, en Falset-Marçà advierten que las cooperativas acabarán perdiendo su razón de ser y hay que encontrar una solución a la falta de nuevas incorporaciones en el sector agrícola.
Con la propuesta del espacio-test, las tres cooperativas pueden contratar a aquellas personas interesadas para que, durante dos o tres años, puedan iniciarse en la actividad, «evaluar su rentabilidad y decidir si quieren seguir trabajando en el sector o no», ha añadido Domènech.
Reducir costes y promocionar los productos
Otro de los objetivos del macroproyecto es trabajar en la reducción de los costes de producción. Para hacerlo, cada cooperativa se centrará en sus productos, y «su especialidad», como ha afirmado el presidente de la Vinícola del Priorat, Ramon Grau. De esta manera, la Cooperativa Agrícola de Cabacés producirá el aceite del conjunto de las tres cooperativas, mientras la uva recogida de la DOQ Priorat irá a la Vinícola del Priorat o el de la DO Montsant se elaborará en las instalaciones de la Cooperativa Falset-Marçà.
Por otra parte, trabajarán para incrementar la producción de las viñas de Cabacés y crear una nueva línea vinícola con las características organolépticas diferenciales de esta zona del Priorat.
En el ámbito comercial, el proyecto también prevé la viabilidad de exportar de manera conjunta las tres marcas: Ònix, Baronia de Cabacés y Ètim. Paralelamente, se quiere potenciar la oferta de actividades enoturísticas, así como las oleoturísticas. La responsable de comunicación de la Cooperativa Agrícola de Cabacés, Núria Bru, ha defendido que «el aceite es un producto muy desconocido», que se puede mostrar al público todo el proceso de producción y hacerle un sitio en el sector del turismo agrícola. «Creemos que hay un mundo muy importante por descubrir», ha puntualizado.
Comunidades energéticas y viviendas
Finalmente, este proyecto de cooperación también busca la creación de otros servicios que favorezcan la mejora de la calidad de vida de los vecinos de la comarca del Priorat. Por este motivo, la voluntad es que cada una de las cooperativas cuente con una comunidad energética, y gestionarlas todas de manera conjunta. Esta operación compartida también se trasladará en un plan de gestión de las viviendas vacías que tienen en propiedad, una propuesta para dar respuesta a la falta de primeras residencias y viviendas habituales de los municipios prioratins, donde ónde la gran mayoría se destinan a usos turísticos.