La moda según el fotógrafo Frank Horvat

Una fotografía de la modelo Monique Dutto, vestida de alta costura a la salida del metro de París, hecha en el año 1959, abre la exposición Please don't smile, que se inauguró ayer por la noche en el Castillo de Vila-seca. La retrospectiva es una recopilación de cerca de setenta fotografías realizadas por Frank Horvat, uno de los fotógrafos más icónicos de la segunda mitad del siglo XX, especializada sobre todo en la fotografía de moda.

La instantánea capta el instante preciso en el que la modelo sube las escaleras rodeada de hombres y mujeres en un momento de tráfico cotidiano. Esta escena es una síntesis perfecta de la manera en la que tenía que entender la fotografía de moda el italofrancés Frank Horvat, el cual revolucionó el sector trasladando a las modelos de la pasarela a la calle, mezclando alta costura y cotidianidad, y captando el instante preciso en el que las dos se fusionan.

Esta exposición, fruto del convenio entre el Ayuntamiento de Vila-seca y la Fundación Antoni Vila Casas, fue ideada por los difuntos Antoni Vila Casas y el mismo Frank Horvat en el año 2018. Así lo explicaba, durante la presentación, el director general de la Fundación, Joan Torras, que detalló que la buena sintonía entre los dos fue instantánea desde el momento en el que se conocieron en París en el año 1999: «Tenían algo en común, y es que los dos eran coleccionistas, uno coleccionaba instantes, y el otro, obras de arte».

Frank Horvat (Opatja, 1928-París 2020) se consagró durante los años 50 y 60 en el género de la fotografía de moda a través de colaboraciones para una larga lista de revistas, entre las cuales Elle en París, Vogue en Londres y Glamour yHarper's Bazaar en Nueva York. Horvat renovó el género de manera evidente aplicando técnicas y estrategias procedentes del fotoperiodismo. El título de la retrospectiva, Please don't smile, hace referencia a la consigna del fotógrafo antes de disparar, convencido de que el rostro serio era el que más se alejaba del ademán tradicional, haciendo salir la auténtica esencia de la modelo.

La exposición que ya se puede visitar en Vila-seca tiene imágenes icónicas, como la anteriormente mencionada, o la que se ha utilizado para portada del catálogo y los carteles, que muestra una modelo con un elegante sombrero blanco de Givenchy, de 1958. En los retratos expuestos también se pueden encontrar rostros conocidos, como el de la modista Coco Chanel, capturada mientras observa un desfile medio escondido entre las sombras, la actriz portuguesa Maria de Medeiros o el director de cine Federico Fellini.

Esta es la primera exposición que se inaugura en el Castillo de Vila-seca sin la presencia de Antoni Vila Casas, que murió el pasado mes de septiembre. Ayer, durante la presentación de la retrospectiva, los responsables de la Fundación, así como los representantes del Ayuntamiento tuvieron un recuerdo para él.