Salud
Aumentan un 10% las agresiones a los médicos en la demarcación de Tarragona, principalmente a mujeres
La Atención Primaria acumula el número mayor de casos mientras que las cifras bajan en los hospitales
El Colegio Oficial de Médicos de Tarragona ha denunciado que el colectivo ha sufrido 215 agresiones este 2023, lo que representa un incremento de un 9,6% respecto el año 2022. Las médicos, de entre 36 y 55 años, son las más agredidas. Este año, se han notificado 96 agresiones, que suponen el 74% del total. La Atención Primaria es el ámbito sanitario que acumula un mayor número de casos (56%) mientras que en el ámbito hospitalario han bajado y se han cifrado en 93.
Además, desde el colegio subrayan que el perfil del agresor es un hombre, en torno a los 40 años. Desde el organismo hacen un llamamiento a denunciar y lamentan que las agresiones se hayan trasladado a las redes sociales, afectando a la reputación de los facultativos.
El presidente del Colegio Oficial de Médicos de Tarragona (COMT), Sergi Boada, ha afirmado que los datos un año más «no son buenos». Este 2023, 159 médicas y 56 médicos han sufrido algún tipo de agresión por parte de los pacientes o de sus familiares. En global, se han notificado 215 agresiones, que suponen casi un 10% más respecto el año 2022, cuando se registraron 196. El 74% de los facultativos agredidos son mujeres.
El año pasado, se cifraron en 96 médicas agredidas respecto a las 56 de hace dos años. En concreto, las agresiones han aumentado un 29% en el caso de las mujeres mientras que en los hombres el incremento ha sido del 4%.«Las agresiones van más dirigidas a las mujeres porque seguramente delante del agresor son un perfil más vulnerable y da más pie a sufrirlas», ha indicado el secretario del Colegio Oficial de Médicos de Tarragona, Manuel Carasol. De hecho, el perfil mayoritario de los agresores, indican, son hombres, de unos 40 años.
En cuanto a los ámbitos de trabajo, la Atención Primaria ha acumulado el 56% de los casos, con 120 agresiones el 2023 mientras que el 2022 se cifraron en 101. «La Atención Primaria es la más castigada, con un incremento del 20% y en el ámbito del hospital se han reducido un 56%», ha especificado Carasol. En 2022, el área hospitalaria registró 93 agresiones. «Tenemos una Atención Primaria muy tensada, donde se plantean cada día muchos problemas, en cambio, en los hospitales a partir de la postpandemia la situación se ha ido normalizando», ha valorado el profesional.
En cuanto a la tipología de agresiones, las amenazas y las coacciones son las más predominantes, con un 48%; seguido de los insultos y las vejaciones que suponen el 36% mientras que las lesiones representan un 7% del total. Además, destacan, el 89% de las agresiones con lesiones van dirigidas a las mujeres. Los responsables del colegio han subrayado que las causas no han variado mucho respecto a los años anteriores. Así, la discrepancia con la atención médica, el tiempo de espera, los medicamentos recetados o las bajas por incapacidad laboral, son algunos de los principales motivos que las provocan. También lo son el mal funcionamiento de los centros o la sobrecarga de trabajo, entre otros.
En la presentación de los datos de agresiones a la demarcación, hecha este miércoles, una psiquiatra de un centro de Reus ha explicado que ha sufrido y que se ha sentido muy vulnerable. «He vivido situaciones donde la respuesta es una doble agresión, muchas veces vienen los Mossos, pero no se hacen detenciones inmediatas y te encuentras que cuando sales del turno el agresor se encuentra en la puerta», ha lamentado. La profesional ha asegurado que los compañeros de seguridad la han tenido que acompañar para velar por su seguridad.
Infranotificación de los casos
Desde el COMT han denunciado la infranotificación de las agresiones que sufren los médicos, así como el resto de profesionales del sector sanitario. Los facultativos han interpuesto dieciséis denuncias en los Mossos d'Esquadra el 2023. El año anterior, fueron tan solo dos. Ante estas cifras, los responsables del colegio hacen un llamamiento para que se denuncien las agresiones y celebran que cada año vayan incrementando el número de denuncias. Señalan que se debe al trabajo de concienciación hecha en la última década. Así mismo, Boada ha lamentado que han crecido las reseñas negativas sobre los profesionales en las redes sociales. Hecho que afecta, sostiene, a la parte más reputacional de los médicos.
«Estamos sufriendo por tener un sistema sanitario público absolutamente enfermo y vulnerable, un sistema sanitario que ahora le estamos dando morfina y aspirinas y lo que necesita es un trasplante urgente; necesita cambios en el sistema de financiación, con colaboraciones publicoprivadas, y cambios en las retribuciones y en los roles profesionales; si no lo cambiamos, continuaremos teniendo un sistema sanitario vulnerable y enfermo», ha denunciado el presidente del COMT.
Por su parte, el secretario del colegio ha aseverado que la solución para disminuir el número de agresiones tiene que pasar por más educación sobre el trabajo de los facultativos y también para promover los canales «adecuados» de comunicación, donde los usuarios puedan expresarse y quejarse. «Sobre todo concienciar que agredir no es gratis, que una agresión a un médico tiene unas consecuencias legales», ha cerrado.