Demografía
El interés por vivir en pueblos pequeños se reduce en Tarragona después del repunte por el covid
Al total de Cataluña, Lleida y Girona han sido las dos demarcaciones donde más ha disminuido este interés
Una de las entradas del pueblo de la Torre de Fontaubella, en el Priorat.
El interés de las familias para comprar o alquilar viviendas en pueblos de menos de 5.000 habitantes se ha reducido en las cuatro demarcaciones catalanas con respecto al 2021, año en que se llegó en los picos de demanda en zonas rurales a causa de la pandemia. Así lo revela un estudio de Idealista, que detalla que Lleida es la demarcación catalana donde más se han reducido las búsquedas en municipios pequeños, pasando de un 29,8% en el 2021 a un 22,9% en el 2023. La sigue Girona, que ha disminuido en un 6,6% la cifra, Tarragona, que ha bajado en un 1,3% y Barcelona, donde la disminución no ha sido tan significativa (0,2%). Con respecto al resto del estado, el estudio alerta de que las provincias más despobladas son las que más han notado esta reducción.
En términos generales, el estudio subraya que durante el año pasado las busquedas de viviendas en municipios de menos de 5.000 habitantes se situaron por debajo de las que había antes del inicio de la pandemia, durante el primer trimestre de 2020, cuando suponían el 5,2% del total a Idealista. Actualmente estas suponen un 4,7% del total de búsquedas.
Por provincias, las más despobladas son las que más han notado la reducción en las búsquedas con respecto a 2021, en concreto las de Cuenca, que ha pasado del 46,8% al 29%, Teruel (del 48,8% al 35,9%), y Huesca (del 48,5% al 35,6%). En cambio, hay provincias donde estas búsquedas han incrementado con respecto a 2021, como a Badajoz, donde han crecido del 5,3% al 6,5%, en Jaén (del 7,2% al 8,1%), o en Granada (del 10% al 10,7%). Con respecto a Cataluña, en ninguna de las demarcaciones se ha registrado un aumento, sino que en todas se ha reducido el número de búsquedas en zonas rurales.
El estudio constata así que el interés de las familias para vivir en estas zonas ha retrocedido hasta niveles previos a la pandemia por covid-19, aunque el portavoz de Idealista, Francisco Iñareta, ha negado que se llegara a producir «un éxodo rural». «Sólo aumentó de forma significativa el interés por establecer el domicilio en zonas alejadas del entorno urbano, ya que ofrecían viviendas mayores, con acceso a jardines, y a un precio menor», ha argumentado.
En Barcelona crece el interés por vivir en zonas rurales
En otra línea, el estudio también ha comparado el interés por vivir en zonas rurales con respecto a 2020, año de la pandemia. Y en este punto ha destacado Barcelona como una de las provincias donde el peso de búsquedas en zonas rurales ha incrementado, ya que los contactos en anuncios en municipios de menos de 5.000 habitantes suponen actualmente un 1,6% del total de las búsquedas, mientras que el 2020 la cifra era del 1,5%. Pasa algo similar a Pontevedra, Valencia o Málaga, hecho que Idealista atribuye al incremento de precios a grandes ciudades, que puede estar arrastrando el interés hacia zonas más pequeñas con precios más bajos».
En el resto de demarcaciones catalanas el interés con respecto al 2020 ha disminuido, especialmente en Lleida, donde las búsquedas han pasado del 32% en el 2020 al 22,9% en el 2023, y en Girona, que ha pasado del 19,0% al 14,6%. En el caso de Tarragona, el interés sólo se ha reducido en un 1,5% con respecto al 2020.