La Costa Daurada cierra un agosto con una ocupación del 90%

Los alojamientos turísticos de la provincia de Tarragona cierran el verano con un alto volumen de ocupación, que ha llegado a su pico en el mes de agosto, con una media de ocupación del 90% en la mayor parte del territorio. El mes de julio ha sido más suave, pero ha alcanzado cifras que han satisfecho a los empresarios y han confirmado la tendencia en que la demanda se concentra en el mes de agosto.

En destinos de costa como Cambrils, las ocupaciones de julio y agosto han sido buenas pero no han superado las del año anterior. Si que lo ha hecho el gasto medio por cliente.

Otros destinos de costa como Altafulla y el Vendrell, han visto incrementar la ocupación a partir de la segunda quincena de julio y han vivido un agosto de récord. También declaran una aumento del gasto medio por persona.

En el caso de las Terres de l'Ebre, la ocupación también ha vivido un agosto de 10, similar a cifras pre-pandemia y un julio notable, sobre todo entre semana.

En el caso de Tarragona ciudad, este julio la ocupación hotelera ha llegado al 90% y en agosto ha incrementado, llegando al pico alrededor del 15 de agosto.

En territorios como el Alt Camp o Reus, los fines de semana han concentrado la ocupación, llegando al 90 e incluso al 100% durante el mes de agosto, pero entre semana, la media del verano ha oscilado entre 50% y el 70%.

Por otra parte, determinadas zonas de interior como la Terra Alta, el Priorat o la Conca de Barberà han tenido una ocupación durante el verano mejor de la esperada, tanto la ocupación como en precio medio, sobre todo durante el mes de agosto. Sin embargo, son zonas que, como cada año, esperan su particular verano de septiembre y octubre; periodo en que el enoturismo, el turismo de naturaleza o el turismo MICE posicionan como atractivos clave para desestacionalizar la demanda.

En cuanto al comportamiento del viajero, como ya va siendo habitual, la última hora ha caracterizado las reservas por todo la provincia y el precio medio, este año, ha sido más elevado en casi todo el territorio.

A partir de ahora, los hostaleros se preparan para un otoño con buenas perspectivas de ocupación, marcada por un cambio en el perfil de cliente que combina el turismo vacacional con el de negocios, sobre todo a partir de la segunda quincena de septiembre y en ciudades como Tarragona, Reus, Tortosa o Valls.

Según, Magí Mallorquí, presidente de la Asociación Hotelera de la Provincia de Tarragona «en agosto siempre es un buen mes para el sector. Ahora seguimos pendientes de las reservas de septiembre para cerrar el verano y hacer frente al resto del año, ya que para la Asociación Hotelera de la provincia de Tarragona, que representa en 130 hoteles en todo el territorio, la temporada no se acaba y dura 365 días».

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