Confusión entre los conductores que se topan con los controles policiales por la DANA en Tarragona

Los usuarios que esta mañana se están tropezando consigo con los controles que los Mossos d'Esquadra están haciendo en varias carreteras del Camp de Tarragona y las Terres de l'Ebre ante el episodio de lluvias intensas, lo hacen en medio de la confusión y la resignación.

En la rotonda de acceso a la AP-7 en Tarragona, la gran mayoría son transportistas. Es el caso de Francisco Moya, un autónomo que trabaja para una empresa de productos congelados. Esta mañana se ha desplazado desde Barcelona hasta Constantí, donde ha descargado los alimentos. «La autopista estaba cortada en Torredembarra y he tenido que dar un gran paseo para poder llegar», ha dicho a ACN. Aunque compran la situación, Moya considera que «es un poco excesivo» y que se tendría que tener en cuenta su tarea.

Desde primera hora de la mañana, los Mossos están haciendo controles en varias carreteras del Camp de Tarragona y las Terres de l'Ebre para regular el tráfico a raíz de las restricciones de movilidad decretadas ante el episodio de lluvias intensas a la zona. Concretamente, afecta las vías de las comarcas del Baix Camp, el Baix Ebre, la Ribera d'Ebre, el Montsià y el Tarragonès, es decir, la AP-7, la C-14, la N-340, la T-11, la T-331, la C-43, la N-420, la TV-3141, la A-7, la N-240 y la C-37, según ha informado el Servei Català de Trànsit (SCT).

Uno de estos puntos ha sido lo de la rotonda de acceso a la AP-7 en Tarragona, concretamente, a la altura del polígono industrial Riu Clar. La mayoría de usuarios han estado transportistas. Algunos, los servicios esenciales, sí que han podido pasar el control policial y coger la vía para hacer llegar sus productos al destino final. Entre ellos, el Luis Gallardo, trabajador de la empresa Carburants Montsià, quien ha confirmado a ACN, que «a partir de las siete de la mañana, se ha encontrado controles en las entradas y las salidas de la autopista». Preguntado sobre la medida, Gallardo considera que «en parte está bien, para evitar de años», pero reconoce que «se podría haber hecho mejor».

Por el contrario, Francisco Moya, un camionero autónomo que trabaja para una empresa de productos congelados, no lo han dejado pasar. «He ido a cargar el material a Barcelona y al venir hacia Tarragona me he dado cuenta que la autopista estaba cortada en Torredembarra», explica este usuario, quien lamenta «la vuelta loca» que ha tenido que hacer para poder llegar hasta Constantí, donde ha descargado las mercancías.

A la vuelta, se ha topado con el control policial al acceso en la AP-7 a Tarragona, donde los Mossos le han indicado que pasara por la nacional y la autovía. Por todo, considera que la medida «es un poco excesiva», sobre todo, para los transportistas para quienes pide más miramientos para poder distribuir las mercancías.

Por su parte, Fèlix, conductor de un turismo, se ha mostrado confuso y ha afirmado «no saber por qué son» los controles, «si no llueve». «No entiendo nada, nadie dice nada, solo te dicen que vayas hacia aquí o hacia allá», ha denunciado este usuario, quien ha añadido que se tendrá «de espabilar» e ir hacia la nacional y la autovía.

Restricciones en el túnel de Lilla

Otro de los puntos donde los Mossos d'Esquadra hacen controles para restringir la movilidad de vehículos es a los accesos del túnel del cuello de Lilla. Desde las ocho de la mañana de este miércoles han cortado la circulación en dirección Tarragona, donde solo dejan pasar los servicios esenciales. Según el Servei Català de Trànsit, se ha producido «poca» retención, con colas de menos de 500 metros en las rotondas de acceso al túnel (A-27) y de la N-240.