El Área Metropolitana tendrá un ente propio que se encargará de captar inversiones en clave territorial

La futura Área Metropolitana de Tarragona (AMT) entrará, este 2025, en la fase de despliegue. Después de un recorrido inicial, durante el cual el Grupo Impulsor ha fijado la hoja de ruta a seguir, el próximo año se empezarán a ver concreciones. La presidenta de la Diputación de Tarragona, Noemí Llauradó, explicaba que será una «prioridad» la implementación de un «instrumento para captar recursos e inversiones a nivel internacional». «Hemos dado indicaciones para que se empiece a crear este equipo de trabajo que irá evolucionando hacia lo que tenga que ser», añadía.

Según ha podido saber Diari Més, la idea es que, a medio plazo, se acabe convirtiendo en un ente con personalidad jurídica propia, como podría ser una agencia. Se prevé que, a lo largo del próximo año, se acabe de definir la forma y el modelo de gobernanza del nuevo organismo. Los ayuntamientos que conforman el Grupo Impulsor disponen de sus propios servicios municipales de desarrollo económico, el cual tendrán que trabajar de forma «coordinada» y «complementaria», y sin pisarse, para «ser competitivos como Área Metropolitana».

Llauradó apuntaba que, trabajando de forma conjunta entre los municipios, se pueden ofrecer «mucho más atractivos turísticos y de ocio», así como un ecosistema de polígonos industriales consolidado. En este sentido, el alcalde de Tarragona y vicepresidente de la Diputación, Rubén Viñuales, señalaba que «tiene todo el sentido del mundo» plantear la promoción económica del AMT «de manera integral y unitaria». «Coordinémoslo de una vez y podremos vender mucho mejor nuestro territorio», expresaba el alcalde.

El modelo de gobernanza

En los próximos meses, se definirá cómo será el modelo de gobernanza que, más allá de las instituciones, integrará también diferentes agentes del territorio, como representantes de los sectores económicos y sociales, las empresas, las instituciones educativas y la sociedad civil.«Queremos dar un amplio margen de colaboración leal y activa a otros actores esenciales como el Puerto de Tarragona, la URV, las Cámaras de Comercio o el Cluster TIC,» apuntaba Viñuales.

Este nuevo instrumento se quiere poner en marcha entre finales del 2025 y principios del 2026, para «dar respuesta a una demanda real y una necesidad objetiva». Antes, habrá que fijar los objetivos estratégicos. Principalmente, este nueve nos buscará establecer un plan de promoción económica interna e internacional con el objetivo de captar recursos e inversiones para la futura Área Metropolitana. Aparte, contribuirá a la creación de un sistema de innovación, conocimiento y emprendeduría y establecerá una estrategia para atraer talento y también retenerlo.

Fijar la Agenda Urbana

La puesta en marcha de este equipo de trabajo para la captación de inversiones internacionales se acordó en la reunión de ayer del Grupo Impulsor. El encuentro estuvo presidido por la presidenta de la Diputación, Noemí Llauradó, y participaron a la delegada del Gobierno de la Generalitat en el Campo de Tarragona, Lucía López; el alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales; la alcaldesa de Reus, Sandra Guaita; el alcalde de Vila-seca, Pere Segura; el alcalde de Constantí, Òscar Sánchez; el alcalde de la Canonja, Roc Muñoz; la alcaldesa de Valls, M. Dolors Farré; el presidente del Consejo Comarcal del Baix Camp, Ernest Roigé, y el presidente del Consejo Comarcal del Tarragonès, Salvador Ferré.

En esta reunión también se acordó el inicio de los trabajos para la creación de una Estrategia de Desarrollo Integrado Local (EDIL). «Es un requisito indispensable que se nos pide para poder optar a financiación europea», señalaba Llauradó. Así pues, se redactará un documento de acuerdo con los objetivos de las agendas urbanas, que fijará las grandes líneas de desarrollo del territorio a partir de los tres criterios indispensables para la Unión Europea: la ordenación del territorio metropolitano, la sostenibilidad, y la cohesión social y económica.

«Tenemos que tener esta planificación estratégica para poder acceder a subvenciones europeas», apuntaba a Llauradó. Por su parte, la alcaldesa de Reus, Sandra Guaita, apuntaba que es «una herramienta fundamental» que «nos permite acceder en los fondos europeos para transformar nuestras ciudades». En este sentido, destacaba la voluntad del Grupo Impulsor de «crecer en el ámbito de la promoción económica desde la visión metropolitana». «También lo haremos escuchando a la ciudadanía», apuntaba Guaita. Y es que también se ha acordado el diseño y creación de un espacio de cocreación ciudadana como palanca para el desarrollo integral del ámbito metropolitano.

En este sentido, se plantea un laboratorio de innovación para hacer frente a retos en el territorio de manera colaborativa. También se ha pactado la creación del grupo de trabajo de Recursos Hídricos, y de un grupo de trabajo con relación a actuaciones para hacer frente al cambio climático. De cara a los próximos meses, el objetivo es que se empiecen a ejecutar acciones tangibles para la ciudadanía.