Vivienda
Salou y el Vendrell, los primeros municipios donde varios inquilinos han dejado de pagar el alquiler
El Sindicat de Llogateres anuncia una huelga del pago de los alquileres
El portavoz del Sindicat de Llogateres, Enric Aragonès, ha anunciado que la huelga del pago de los alquileres se pone en marcha: «Empieza la ya anunciada revuelta de las llaves». Así lo ha dicho este miércoles en una rueda de prensa, en la que se ha detallado que en pisos de Salou y el Vendrell ya se han dejado de pagar dos meses y en Sentmenat (Vallès Occidental) se espera que se inicie la huelga el 1 de marzo de 2025.
Ambos bloques , según ha precisado, son propiedad de Immo Criteria. Aragonès ha justificado la huelga por, entre otras razones, las «cláusulas abusivas» en vivienda de protección oficial (HPO). El portavoz ha puesto el acento en el hecho de que son «los primeros pasos de un movimiento huelguista» después de la manifestación del 23 de noviembre en Barcelona.
Salou se ha convertido en el punto de partida de la primera huelga de alquileres después del 23-N. Desde el lunes 9 de diciembre, un total de 29 familias de promociones de viviendas de protección oficial gestionada por La Caixa (Inmocaixa) han iniciado una huelga de alquileres de dos meses, devolviendo el recibo de los dos últimos meses del año.
A las 23 familias de Salou, que representan el 62% del total de inquilinas de la promoción, se suma un grupo de seis familias de la promoción de La Caixa situada en el Vendrell. El impago conjunto asciende a unos 20.000 €, y además se exige la devolución de los importes cobrados en concepto de IBI.
Esta acción se produce después de una sentencia del Tribunal Supremo que declaró ilegal cobrar este impuesto a inquilinas de viviendas protegidas.
Las inquilinas denuncian que La Caixa ha cobrado más de 10 millones de euros en IBI sólo en Cataluña y reclaman la retirada inmediata de esta cláusula abusiva, así como la devolución de las cantidades cobradas ilegalmente. Además, exigen al futuro propietario de las promociones, el Incasòl, que garantice el fin de estas prácticas y tome medidas para proteger los derechos de las familias afectadas.
La huelga también se convoca en solidaridad con las promociones no adquiridas por el Incasòl y que todavía son gestionadas por Inmocriteria, donde persisten las acciones del banco para expulsar a las inquilinas.