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Medio Ambiente

Un paisaje de Aiguamúrcia, ejemplo europeo para estudiar cómo hacer frente a los incendios mediterráneos

Técnicos catalanes, italianos y portugueses trabajan para crear sinergias dentro del proyecto 'Res-Alliance'

Representants agraris i forestals al 'Biodistricte zona +500', situat al Pla de Manlleu, a Aiguamúrcia.

Representantes agrarios y forestales en el 'Biodistrito zona +500', situado en el Pla de Manlleu, en Aiguamúrcia.ACN

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El paisaje mosaico Biodistrito zona +500, situado en el Pla de Manlleu, en Aiguamúrcia (Alt Camp), ha sido escogido como ejemplo europeo para estudiar cómo hacer frente a los incendios forestales en el Mediterráneo.

En el marco del proyecto Res-Alliance, organizado por la Fundación Pau Costa, el IRTA y el Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña (CTFC), una quincena de representantes agrarios y forestales del Penedès y el Baix Llobregat, así como de Italia y Portugal, han visitado este miércoles la zona para crear sinergias entre países y poner en común prácticas de gestión sostenible. «El objetivo es construir una red para identificar necesidades y pensar en soluciones para hacer frente al cambio climático», han afirmado desde la organización.

Aunque este miércoles sólo representantes de Italia y Portugal han visitado Cataluña, el proyecto también integra técnicos de Grecia y Chipre. «Son todos países del Mediterráneo que tienen una situación y afrontan unos retos muy similares a los que tenemos aquí», ha expuesto el técnico de proyectos de la Fundación Pau CostaDavid Martín, quien ha celebrado que a través de la iniciativa se está creando «un escenario muy interesante para compartir, intercambiar y pensar juntos en soluciones para hacer frente al cambio climático».

En este sentido, Martín ha afirmado que los incendios forestales son uno de los grandes retos que ha puesto encima de la mesa el cambio climático y la sequía. De hecho, y según Centre de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña (CTFC), el calentamiento del Mediterráneo avanza un 20% más rápido que la media mundial. Una situación que agrava las condiciones de sequía, aumenta el riesgo de incendios forestales y amenaza la productividad alimentaria, así como la disponibilidad de agua, el bienestar humano y la supervivencia de numerosas plantas y especies animales únicas en la región.

El 'Biodistrito zona +500'

Ante este panorama, la Fundación Pau Costa, el IRTA y el CTFC iniciaron hace un año y medio este proyecto europeo destinado a revisar y desarrollar prácticas de gestión sostenible que contribuyan a mitigar el impacto de los incendios forestales. Entre las actividades programadas, se integra la jornada de este miércoles, donde una quincena de representantes agrarios y forestales han visitado el Biodistrito zona +500 como ejemplo de cortafuego.

Se trata de un espacio que, aunque empezó sólo con la gestión de las viñas, «poco a poco se ha entendido que al estar en un entorno agroforestal, tenía que existir esta relación entre bosques y viña, porque uno se influencia del otro», ha defendido Lluís Coll, formador de la academia de la poda y responsable técnico de Vallformosa y de la Agrupación de Defensa Forestal (ADV) del Pla de Manlleu.

Según Coll, actualmente, esta entidad formada por una cuarentena de vecinos también ayuda a preservar los bosques que lo rodean. «Lo que se intenta es que con este equilibrio entre la viña y el bosque, se llegue a proteger todo el espacio forestal y se limite los efectos del fuego», ha afirmado Coll.

El pasturaje, otro ejemplo

La jornada de este miércoles ha finalizado con la visita a Can Mimó, en Vacarisses (Vallès Occidental), donde David Pérez, ganadero, productor y miembro del proyecto Enramados de Foc, ha explicado como a través de su rebaño trabaja en zonas estratégicas para la prevención de incendios forestales.

Según Marc Taüll, técnico del CTFC, el pasturaje es otro ejemplo de buena gestión de los bosques, ya que ayuda a disminuir la carga de combustible en aquellas «zonas que los Bombers han clasificado como estratégicas», es decir, espacios «donde está la oportunidad de parar un incendio». Sin embargo, Taüll ha lamentado que no hay suficientes ganaderos para cubrir todas las zonas estratégicas que se han definido en Cataluña.

Próximamente, y de la misma manera que representantes de Italia y Portugal han visitado Cataluña, técnicos agrarios y forestales catalanes también visitarán otros países del Mediterráneo para conocer otras prácticas de gestión sostenible.

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