Cultura
El Festival Jordi Savall hace un clamor por la paz y la convivencia en Santes Creus
La Capilla Real de Cataluña y Hespèrion XXI interpretan músicas "que han permitido sobrevivir a los seres humanos"
La segunda noche del Festival Jordi Savall en el monasterio de Santes Creus ha sido un clamor por la paz y la convivencia con dos conciertos con músicas de diferentes lugares del mundo. Primero, la formación Ensemble Ekyat ha ofrecido el espectáculo 'La voz de los tártaros', donde las sonoridades y danzas asiáticas han llenado el dormitorio del monasterio.
Posteriormente, en la iglesia, la Capilla Real de Cataluña y Hespèrion XXI dirigidas por Jordi Savall han interpretado principalmente piezas de los siglos XV y XVI en un recital denominado 'Pro pacem'. "Estas músicas han sido la medicina que han permitido sobrevivir a los seres humanos", ha afirmado el prestigioso maestro violagambista.
El festival se celebra durante toda la semana y hasta el domingo en Montblanc, Santes Creus y Poblet. Participan unos 200 músicos de diferentes lugares del mundo especializados en música antigua y la recuperación de patrimonio musical de todas partes.
La paz y el diálogo son los ejes sobre los cuales se fundamenta el certamen, que llega este año a la cuarta edición. "La música permite establecer puentes con culturas y creencias diferentes y cada concierto es un ejemplo de esta forma de convivir porque a través de la música nos entendemos siempre", ha manifestado Savall.
El maestro considera que las del festival "son músicas de paz porque nos traen paz al espíritu". "Han permitido salvar esclavos del Caribe, de Brasil, de Estados Unidos o Mali, y muchas de ellas son populares", ha remarcado. Asimismo, ha destacado el poder de este arte por viajar en la historia: "nos hacen descubrir qué pasó hace 700 años o 300 años, sentimos la misma emoción que sentía la gente de aquella época". "La música es la verdadera historia viviente de la humanidad", ha indicado.
A pesar de la voluntad de luchar por la paz, Savall lamenta la situación actual en el planeta. "El mundo está desorientado y las grandes personalidades son incapaces de hacer acciones y detener el genocidio, la barbarie y la guerra. Nosotros tenemos que decir que no estamos de acuerdo y tenemos que poder decir que cantamos la paz y esperamos la paz", ha reclamado el músico.
El coordinador general del Festival Jordi Savall, Martí Santcliment, ha valorado que es "un programa con muchísima coherencia" que "traza un diálogo intercultural" a partir de "músicas, lenguas, sentimientos y expresiones de varios pueblos y culturas de todo el mundo".
Santcliment, ha explicado que se prevé que pasen por el certamen en torno a unas 6.000 personas, ya sea para ver alguno de los 13 conciertos, o bien asistir a las actividades paralelas, como es el caso de las conferencias, las visitas guiadas temáticas, la zona gastronómica o los ensayos abiertos.
El festival también está comprometido con la creación joven y emergente, y un año más habilita varios escenarios para proyectos liderados por ellos. La Joven Capilla Real de Cataluña y la orquesta Les Musiciennes du Le Concert des Nations y El Ensemble Irini (Francia) son algunos de los participantes. Esta última formación está disfrutando de una residencia artística para la preparación de su repertorio. Se les podrá escuchar este jueves, también en la iglesia de Santes Creus.