El milagro constructivo de Jujol en Vistabella

La iglesia del Sagrat Cor de Vistabella ha estado todo un año celebrando su centenario con diferentes actos. Hoy, como clausura, se inaugura una exposición en colaboración con el Colegio Oficial de Arquitectos de Tarragona que quiere hacer valer la construcción de esta obra única en el Camp de Tarragona.

El Sagrat Cor es singular por varios motivos, pero lo principal es que se trata de «la única obra que inició y acabó Jujol dentro de la demarcación» tal como detalla el alcalde de la Secuita, Eudald Roca. En el año 1918, los habitantes del núcleo de Vistabella pidieron al Arzobispado poder construir una iglesia en su municipio, dado que hasta entonces se tenían que desplazar un kilómetro hasta la Secuita. La autoridad eclesiástica aceptó la petición, pero con la condición de que no pagaría ni un céntimo de estas obras.

Los 100 habitantes contactaron entonces con Jujol por una casualidad, según detalla Roca, ya que el arquitecto modernista veraneaba en el pueblo y resultó el único contacto con el que contaban. Empieza entonces el milagro arquitectónico que permitió levantar un templo en sólo cinco años. Milagro sustentado por el trabajo de los vecinos y vecinas de Vistabella, que sacrificaban su tiempo para dedicar dos días por semana a su construcción.

Jujol agudizó su ingenio para ejecutar los trabajos con piedras del campo o ladrillos del Morell, ya que el presupuesto era sumamente limitado. Para las decoraciones utilizó dibujos en tiza o botes de leche condensada para formar a un candelero. Roca remarca cómo «los herederos vivos del momento recuerdan el esfuerzo que supuso».

El resultado, asegura el alcalde, es «un templo que te hace perder la noción del espacio, con una sonoridad única y donde una luz única ilumina la uva, el trigo y los pájaros que identifican al Camp de Tarragona». A través de fotografías y planos inéditos se ha conseguido representar lo que significó este hito arquitectónico hecho «desde el pueblo y para el pueblo», detalla Josep María Mañé, concejal de cultura.

El concejal asegura que la exhibición ya ha llamado la atención de diferentes escuelas de arquitectura de toda Cataluña y el objetivo es «hacerla girar por todas las universidades del país a partir de diciembre». Uno de los objetivos es «reivindicar la obra de Jujol, no como un discípulo de Gaudí sino un colaborador», afirma Mañé.