Cultura
Una obra teatral reflexiona sobre el peso de la petroquímica en el imaginario camptarragoní a raíz del atentado de Enpetrol
La pieza se estrena el domingo en el Convent de les Arts de Alcover con un programa de radio como hilo conductor
Petro, una història d'amor es la obra de teatro documental que este domingo se estrena en el Convent de les Arts de Alcover. A partir de un programa de radio la noche del atentado de Enpetrol, el 12 de junio de 1987, el texto reflexiona sobre el peso de la petroquímica en «el imaginario» y el «paisaje» del Camp de Tarragona.
Los actores Maria Alejandre, Pau Ferran y Bàrbara Roig y la directora Judith Pujol han creado una ficción que tiene como punto de partida testigos reales. A pesar de ser de comarcas tarraconenses, los cuatro creadores viven en Barcelona. Confiesan a la ACN que la pieza los ha ayudado a «reconciliarse».
«Cuando vives a fuera te olvidas un poco, porque somos gente avergonzada por la refinería, pero es un territorio muy bonito,» dice Roig. Cuando pasaba media hora de las doce de la noche del 12 de junio de 1987 una fuerte explosión despertó el Camp de Tarragona. ETA hizo estallar dos bombas colocadas en el 'rack' de Enpetrol, ahora Repsol.
La ciudadanía empezó a huir colapsando carreteras y autovías, y los informativos especiales radiofónicos fueron un refugio para toda una población trastornada por el pánico. «Un lugar donde informarse, encontrar a sus familiares», explica la directora teatral. Ahora, 37 años después, una obra de teatro producida por Producciones De Lo Nostro revisita aquel episodio.
Tres años de proceso creativo
El proceso de creación se ha alargado más de tres años. Esta semana han estado en residencia en el Convent de les Arts haciendo los últimos retoques, pero el trabajo de investigación viene de lejos. Han recuperado voces que sonaron por la antena aquella noche, y han recogido nuevos testigos.
Haciendo toda la investigación te planteas dónde estamos viviendo, y qué tenemos cerca. Aparte de las cosas maravillosas, también está la petroquímica», señala Alejandre que la noche del 12 de junio tenía 12 años. Todavía recuerda cuándo se despertó con el miedo a que el atentado provocara una «reacción en cadena» de explosiones.
La pieza evoluciona desde que explota el 'rack' hasta primera hora de la mañana con varios programas de radio como hilo conductor, nutrido de una «polifonía» de voces reales y de otros ficcionadas, dice la directora. Encarnado insiste en que se trata de un hecho que «afecta a todo el mundo». «Habla de un tema universal como es tener una cosa peligrosa al lado y convivir», añade.
El peso de la petroquímica
Quieren incidir en el peso que tiene el complejo petroquímico mayor del sur de Europa en la sociedad y la idiosincrasia de la demarcación. «Si hay una cosa que define el territorio es la refinería», remarca Pujol. «La petroquímica tiene un espacio muy importante en el paisaje, pero también la han cogido espacios que habíamos olvidado y que hacen que el Camp de Tarragona sea una maravilla», argumenta Roig.
Han hablado con sanitarios que trabajaron la noche de los atentados de Enpetrol, personas que lo vivieron, han indagado en los protocolos de emergencias, todo para profundizar en el «riesgo» que tiene compartir espacio con la industria química.
Encarnado reflexiona que ninguno de los miembros de la compañía «vive» de la petroquímica. «Es muy fácil coger una postura totalmente crítica cuando tú no te dedicas a eso ni vives aquí, hay mucha gente que trabaja», subraya. Los creadores de Petro, una història d'amor juegan con esta dicotomía. Alejandre concluye que «tenemos que ser conscientes, sin darle la espalda y mirándola en la cara».