Los regantes de Riudecanyes reclaman al Govern que haga de urgencia las obras para disponer de agua regenerada de Reus

La Comunidad de Regantes del Pantano de Riudecanyes ha reclamado al Govern que actúe de urgencia para hacer las obras a la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Reus que permita dotar de agua regenerada a los campesinos para poder regar sus terrenos. La comunidad ha creado una comisión específica para abordar esta situación y ha lamentado la lentitud de los trámites.

De hecho, los miembros han criticado que todavía no se ha publicado la licitación de la obra y han pedido una reunión con el consejero de Acción Climática, David Mascort, para conocer las intenciones del departamento. En este sentido han alertado de que hay campesinos que no han podido regar este verano y que eso ha hecho que algunos árboles hayan muerto, un hecho que deja en una situación "crítica".

Desde la CRPR han explicado que inicialmente la licitación del proyecto se tenía que publicar en noviembre pero que a día de hoy Acción Climática todavía no ha hecho este trámite. Les obras a fin de que se pueda aprovechar el agua regenerada para el regadío constan de cuatro elementos. La primera es hacer unos trabajos al EDAR de Reus con el fin de regenerar el agua. Después hace falta construir una cañería hasta una balsa donde se almacenará el agua, construir esta balsa y finalmente conectarla con la red de distribución de la CRPR. Les dos primeras partes dependen de la Agencia Catalana del Agua (ACA) y las otras dos las tendría que impulsar Agenda Rural, tal como ha detallado Miquel Àngel Prats, administrador de la comunidad.

Según las estimaciones expuestas por Prats, actualmente el EDAR de Reus desperdicia entre cinco y seis hectómetros cúbicos (hm3) anuales. "Si tuviéramos cinco podríamos regar con total normalidad. Con 2,5 hm3 podríamos tener un riego como el del 2022, que es un 40% de la dotación normal; y con eso salvaríamos los árboles", ha indicado.

Los miembros de la CRPR han insistido en la urgencia para tener a punto esta obra. "No tenemos margen", ha señalado Martí Macias, miembro de la comisión, que ha expuesto que las fincas que se encuentran en una situación más delicada son las que dependen exclusivamente del agua del pantano de Riudecanyes para regar y que no lo han podido hacer este verano. En algunos casos ya se han tenido que arrancar árboles que han muerto. Otros campesinos, ha dicho, están esperando si llueve o si hay alguna otra perspectiva para decidir qué hacer.

Situación delicada

De todos modos, en el ámbito de las 4.000 hectáreas que la CRPR abastece, hay que tienen la alternativa de utilizar agua de pozos y minas. Pero en estos casos la incertidumbre es máxima porque no saben cuánto tiempo más durarán las reservas, si continúa la sequía. Por todo ello, Macias ha manifestado que la problemática "es una cuestión de territorio". "Si los árboles mueren no sólo los campesinos saldrán perjudicados. También las cooperativas, y si fallan más cosas se irán al garete. Nos tenemos que implicar todos", ha reclamado.

Este martes el pantano de Riudecanyes se encuentra al 3,41% de su capacidad, unas reservas que son prácticamente inexistentes desde hace meses. El pantano de Siurana, que abastece también Riudecanyes, tiene una situación prácticamente idéntica (3,67%). Con todo el agua de Riudecanyes no sirve sólo para abastecer los regantes, sino también municipios próximos como Reus o empresas de la zona. Sobre la gestión que se ha hecho del agua, los regantes de momento no quieren hablar.