Agricultura
El aceite de la Selva del Camp consagró el nuevo altar de la reabierta Catedral de Notre-Dame
El oro líquido Antara, de la Selva del Camp, ya está presente en la Basílica desde el 2008
Imagen del arzobispo de París, Laurent Ulrich, consagrando el nuevo altar de Notre-Dame.
Este pasado fin de semana, la Catedral de NotreDame de París reabrió sus puertas después de cinco años de reconstrucción, desde el incendio que destruyó gran parte de la estructura superior y la aguja el año 2019.
La ceremonia inaugural se celebró el sábado, e incluyó uno de varios momentos simbólicos: la consagración del nuevo altar con aceite de oliva virgen extra. Este, eso sí, denominado Antara, es producido en la cooperativa Coselva de la Selva del Camp.
Este oro líquido, con Denominación de Origen Protegida Siurana, es habitual en la catedral de Notre-Dame desde el año 2008, donde se utiliza para el sacramento de la unción de los enfermos. El arzobispo de París, Laurent Ulrich, usó el aceite catalán durante la misa inaugural, vertiéndolo sobre el altar como aparte del ritual de consagración.
Según Coselva, esta colaboración empezó hace más de veinte años, gracias a una chica parisina que veraneaba en Tarragona, y quedó cautivada por la esencia del aceite. Hoy en día, este producto, que refleja el esfuerzo de los campesinos del Baix Camp, se distribuye por todo el mundo.