Empieza la 4.ª fase de las obras de restauración del castillo de Barberà de la Conca

La Generalitat ha iniciado la 4.ª fase de las obras de restauración del castillo de Barberà de la Conca (Conca de Barberà), con el objetivo de restaurar y reparar parte de las fachadas y muros del castillo, así como para dar accesibilidad en la entrada del recinto.

Esta actuación deriva de un convenio de colaboración entre el Departament de Cultura, el Institut Català del Sòl y el Ayuntamiento de Barberà de la Conca, en aplicación del 1,5% cultural, firmado en diciembre de 2021.

El proyecto ha sido redactado por los arquitectos Jordi Portal Liaño, Joan Albert Adell Gisbert, Claire Palluel, Joan Espuis y Arrate Ayala. La inversión total para llevarlo a cabo es de 248.000 €, aportados por el INCASÒL y el Ayuntamiento de Barberà de la Conca a partes iguales.

Las obras se centrarán en la revisión y restauración de las fachadas y muros norte y este, así como en la coronación de la muralla este. También se sustituirá la gárgola existente en la fachada este. En la parte exterior se urbanizará el espacio del patio, donde se construirán parterres. También se mejorará el acceso al recinto, añadiendo rampas y creando un nuevo trazado por la escalera.

Durante la primera fase se construyó la cubierta de la capilla y el forjado de la planta baja, posteriormente, se hizo la restauración más estructural y se acondicionaron la planta baja, la primera planta, la galería porticada y la cisterna. Finalmente, durante la última fase se adecuó el interior del edificio como museo, a la vez que se recuperó el muro existente, y se adaptó la torre de vigía como mirador.

Un castillo del siglo XI

El castillo, cualificado como bien cultural de interés nacional, es una construcción del siglo XI que se encuentra en la cima del montículo donde se asienta el pueblo de Barberà de la Conca. Consta de un patio abierto delimitado por la muralla y una parte edificada en el sur, donde se encuentra, actualmente, el edificio principal del castillo.

Durante el siglo XI, la fortaleza crucial en los enfrentamientos entre almorávides y almohade y finalmente fue abandonado. Posteriormente, el año 1054 Ramon Berenguer II lo otorgó en feudo a Arnau Pere Ponts. A principios del siglo XII se cedió Barberà a los templarios, que la convirtieron en una sede importante de su orden.

Después de la supresión de la Orden del Templo, en 1317, el pedido pasó en los hospitalarios, bajo el liderazgo de Guillem de Guimerà. Esta demanda se mantuvo hasta el siglo XIX, cuando el castillo pasó a manos del Estado y, finalmente, el año 1858 pasó a ser municipal.