Sucesos
Consternación y rechazo por el crimen de Mas d'Enric en el minuto de silencio en el centro penitenciario
El Departamento de Justicia abre una investigación interna para modificar los protocolos
Cerca de un centenar de personas de la prisión de Mas d'Enric del Catllar se han concentrado este jueves en las puertas del centro penitenciario para mostrar su indignación y consternación por la muerte de una cocina por parte de un interno este miércoles, que se suicidó después de cometer el crimen.
Los funcionarios han hecho más de cinco minutos de silencio y han depositado un ramo de flores en el centro de la protesta. También han pedido la dimisión de la consellera de Justicia, Gemma Ubasart, que ha asistido al acto. «Reiterar la voluntad de acompañar a los trabajadores y dar el pésame a los familiares de la víctima ante este triste y grave incidente», ha dicho Ubasart.
El Departamento ha abierto una investigación interna para estudiar si modifican los protocolos.
Trabajadores penitenciarios y compañeros de trabajo de la mujer muerta este miércoles por un recluso en la prisión de Mas de Enric se han reunido a las doce de este mediodía en la puerta de entrada del centro penitenciario para mostrar su rechazo y dolor por la muerte de la cocinera. Han guardado más de cinco minutos de silencio en una concentración donde muchos estaban visiblemente afectados. En medio, de todos ellos, han depositado un ramo de flores en memoria de la víctima.
La consellera de Justicia, Gemma Ubasart y el secretario de Medidas Penales, Amand Calderó, han asistido al acto. Después de los minutos de silencio, ambos han dirigido unas palabras a los empleados, que les han recriminado el crimen y les han mostrado su indignación. La titular de Justícia ha abandonado la concentración entre silbatos y gritos de «fuera». Los concentrados también le han pedido su dimisión.
A continuación, Ubasart ha afirmado que la voluntad del Govern es acompañar a los trabajadores penitenciarios y a los familiares y amigos de la víctima en un día «tan triste y duro». «Quiero realzar la enorme tarea que hacen los profesionales penitenciarios, unos colectivos que a veces estan poco presentes en la vida mediática, pero que hacen una tarea imprescindible», ha dicho. A la vez, ha reiterado su pésame y su afecto para el entorno la mujer muerta.
Más allá de la actuación policial y judicial, el Departament ha puesto en marcha una investigación interna para esclarecer los hechos y decidir si se tienen que modificar los protocolos. De hecho, el secretario de Medidas Penales, Amand Calderó, ha aseverado que ya existen estas actuaciones de seguridad en el ámbito de la cocina y otros servicios, pero ha declinado explicarlos, justificando que se trata de una cuestión interna.
El preso ejercía cierto cargo de responsabilidad interna que en el día a día del centro -se conoce como jefe -y era una persona de confianza en la cocina. «Estamos ante un incidente muy grave, siempre conlleva información reservada, tenemos que estar atentas y muy respetuosos con el procedimiento judicial y policial, no nos podemos pronunciar sobre lo que haremos porque tenemos que atender a las investigaciones tanto judiciales como policiales y nuestra interna», ha argumentado.