Sociedad
Más de un centenar de trabajadores penitenciarios recuerdan a la cocinera asesinada a Mas d'Enric
Los funcionarios reclaman a la nueva consejería de Justicia que se los escuche y exigen mejoras en seguridad
Más de un centenar de trabajadores penitenciarios han homenajeado este viernes a la cocinera de la prisión de Mas d'Enric asesinada en manos de un preso justo hace seis meses. Los empleados del centro del Catllar y también de Ponent, así como familiares y amigos han hecho cinco minutos de silencio y han depositado flores en la entrada de Mas d'Enric. Los funcionarios han pedido a la nueva conselleria de Justicia que los «escuche» y los «respete».
También han reclamado mejoras en materia de seguridad y más recursos, ya que aseguran no son suficientes la veintena de nuevos trabajadores en el centro tarraconense para trabajar con garantías. «Lo añoramos cada instante, se nos hace muy difícil continuar el día a día sin ella», ha expresado Pablo Martínez, primo de Núria.
Los trabajadores de prisiones han reclamado mejoras en el ámbito de la seguridad y «volver vivos a casa». «Han pasado seis meses y no ha cambiado, no se han depurado responsabilidades en ningún sentido, no ha habido dimisiones ni comisiones internas para averiguar donde falló el sistema, se ha tapado todo», ha denunciado la Francina, una funcionaria del centro penitenciario de Mas d'Enric.
Aunque reconoce que se han modificado los protocolos en los talleres productivos, ha lamentado que se han vuelto a ubicar internos, condenados por delitos de homicidio o de asesinato en las cafeterías de las prisiones de Ponent y del Catllar.
El sindicato CSIF lo denunció este martes y el preso que estaba en la cafetería se retiró de forma preventiva de esta posición. «No hace ni seis meses que se murió Núria y ya han intentado poner dos internos, uno en la cafetería de Ponent y otro en la de Mas d'Enric. ¿Qué pasará cuando pasen seis años? ¿Si ya no nos acordamos de lo que ha pasado y ya volvemos a poner presos con delitos de sangre dentro de las cafeterías? Volveremos a estar como o peor», ha lanzado Francina.
Para ella la solución es sencilla, asegura que si el perfil de los reclusos ha cambiado y ya no se ajusta a los criterios, se tienen que contratar personal de fuera.
Demandas en el nuevo Govern
La funcionaria ha pedido al nuevo Departamento de Justicia y Calidad Democrática que los respeten y que escuchen sus demandas. «Nos sentimos despreciados, queremos que nos valoren y que nos den herramientas para poder trabajar, y sobre todo, que no nos fiscalicen porque ya sabemos cuál es nuestro trabajo, ya nos fiscalizamos nosotros mismos, que somos muy exigentes,» ha subrayado la trabajadora penitenciaria.
Además, ha considerado que la veintena de nuevos empleados contratados en el centro de Mas d'Enric no son suficientes: «no nos refuerza nada, tendrían que entrar 100 de golpe a todos los centros de Cataluña». Y ha añadido: «20-25 funcionarios repartidos entre ocho guardias, personas que trabajan entre semana, el fin de semana y por la noche, representa el incremento de un funcionario».
El homenaje ha acabado con el grito «todos somos Núria». A las diez de esta noche se ha previsto otro acto para recordarla.