La renovada carretera entre el Catllar y Tarragona facilita el tráfico de peatones

Ir caminando desde el Catllar hasta las urbanizaciones de Llevant de Tarragona ya es posible. Así lo ha remarcado orgulloso el alcalde del Catllar, Xavier Canadell, en la inauguración de la carretera TP-2039 renovada. Esta vía conecta la urbanización de Boscos y Monars con las de Cocons y Mas Blanc, por ella transitan cerca de 2.200 vehículos al día, según datos aportados por la Diputación de Tarragona.

Esta semana han culminado los trabajos que se han alargado durante un total de veinticinco meses con una inversión de 4,9 millones de euros de la diputación tarraconense. Como resultado, la nueva carretera cuenta con una calzada de 8 metros, tres nuevas rotondas y varias paradas de autobús antes inexistentes.

Otro de los puntos importantes es la nueva rotonda construida al lado del cementerio del Catllar, la cual cambia una estructura lateral por una central e incorpora varios pasos de peatones para mejorar la seguridad de la zona. Noemí Llauradó, presidenta de la Diputación de Tarragona, afirma que estas son unas obras que «fortalecen el carácter metropolitano de la región». La presidenta asegura que esta ejecución ha sido «una prioridad» por el ente que lidera, ya que permite «mejorar la seguridad y el bienestar de los vecinos y vecinas que utilizan este tramo».

Llauradó ha remarcado el componente sostenible que supone este cambio, por el hecho de que la renovación permite la circulación en bicicleta o a pie por este vial y, además, se han aumentado y adecuado las paradas de autobús en estos cinco kilómetros. De hecho, el aumento de la anchura de la vía no cede prácticamente nuevos espacios a los coches, sino que permite que durante todo el recorrido puedan transitar peatones, sea por calzada pacificada o por aceras de nueva construcción.

Así lo ha constatado también el alcalde del Catllar, quien afirma que estas obras «benefician especialmente a los niños que ahora podrán ir caminando a la escuela». Como reclamo, el alcalde ha apuntado a la necesidad de aumentar la frecuencia de autobuses y mejorar también la vía que conecta el municipio con la estación de Perafort.

Por su parte, el alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales, asegura que esta es «una infraestructura muy importante porque no sólo une Tarragona y el Catllar, sino a centenares de personas». El alcalde ha reivindicado la importancia de obras como estas para «reforzar el equilibrio territorial e invertir en los municipios independientemente del tamaño o la población que tengan». La presidenta de la Diputación ha notificado que la próxima carretera que sufrirá una adecuación similar a esta será la T-203, que conecta la Riera de Gaià con el Catllar.

Obstáculo en las obras

La parte tarraconense de esta adecuación sufrió un importante obstáculo durante los aguaceros de Santa Tecla de 2022, produciéndose considerables daños en las obras mientras estas actuaban en la urbanización de Boscos. Los responsables de los trabajos aseguran que se ha destinado aproximadamente un millón de euros al total del importe para restaurar servicios afectados. Como ejemplo, se tuvieron que reparar 1.500 metros de alcantarillado y varios metros de línea de tensión.