Judicial
Salou se personificará en los juzgados por los recursos contra Funecam
Hay tres municipios más interesados en entrar en la empresa
Imagen del consejo plenario celebrado ayer en Salou.
El consejo plenario del Ayuntamiento de Salou ha acordado comparecer y personificarse ante el tribunal superior de Justicia de Cataluña y el juzgado contencioso administrativo número 2 de Tarragona por el caso en torno a la sociedad funeraria supramunicipal Funecamp. Esta empresa, de la cual forman parte los ayuntamientos de Reus, Salou, Vila-seca y Constantí, tendría que haber empezado a operar en 2024, pero diferentes recursos interpuestos por las empresas funerarias de la demarcación han retrasado su despliegue.
Durante el pleno de ayer, Pere Granados, alcalde de Salou, defendió la constitución de esta empresa alegando que «servirá para mejorar los servicios a los ciudadanos». Además, el alcalde detalló que otros tres municipios ya han mostrado interés a formar parte de esta sociedad.
Por el contrario, esta decisión fue criticada en el pleno desde la oposición. Ana Belén Rodríguez, portavoz del grupo municipal de Vox, explicó su contrariedad alegando una preocupación por «casos de acoso y contrataciones por enchufe» en la empresa matriz, Serveis Funeraris Reus Baix Camp. Yeray Moreno, concejal socialista de Hacienda, respondió que «estos casos han quedado en el pasado y la empresa ha firmado un nuevo convenio».
Por su parte, el portavoz del PP, Mario García, se abstuvo a los dos puntos argumentando que «los costes judiciales se elevarán a 6.650 euros». El popular afirma que «no vemos claro» la constitución de una empresa municipal para este servicio.
Con la funeraria supramunicipal, los ayuntamientos prevén reducir en un 30% el precio del servicio que ofrecen las empresas privadas del sector. Según se detalló el verano del 2024, el precio base será de 1.800 euros y el medio, de 2.800. Granados afianzó que esta empresa «permitirá mancomunar servicios con una visión metropolitana», asegurando que su constitución será «un voto de confianza» que se echará atrás si «no funciona bien».