El cebetista Ferran Torres entra en el quinteto inicial de la jornada
El pívot sufre del tobillo, pero no baja los brazos y aguanta los partidos enteros
Torres llevatoda la temporada demostrando que más allá del físico, para jugar al baloncesto se necesita un talento que pocos jugadores tienen en la misma cantidad que el pívotde Hospitalet de l'Infant. A fuerza de movimientos inesperados, sorprendentes y poco ortodoxos, Ferran Torres está firmando una media de 19 puntos y 24,6 puntos de valoración en las últimas tres jornadas. El jugador de tan sólo dos metros de altura sufre en silencio cada partido sus dolores en el tobillo para fajarse con pívots|pivotes más pesados que él. No obstante, la superioridad física de sus rivales no les impide acabar desazonados por los movimientos con los cuales Ferran deleita en una gradería entregada a uno de sus jugadores más carismáticos. El sábado pasado, sus 24 puntos con 10 de 12 en lanzamientos de campo le sirvieron para ser nombrado, una vez más, en el quinteto ideal de la jornada de LEB Plata.
Vuelta al trabajo
Con los play-offs asegurados y entre rostros de alegría, el CBT devolvió ayer a los entrenamientos para preparar el partido que el sábado que viene les enfrenta al Ciudad de Valladolid, a partir de las siete de la tarde.
Después de ir consiguiendo sus objetivos poco a poco, ahora el CBT afronta el reto más difícil: conseguir el factor campo a favor en las eliminatorias de ascenso a LEB Oro. Para eso, la escuadra tarraconense tendrá que ganar los dos partidos que le quedan y, además, esperar que sus rivales directos pierdan algún duelo.
De todos modos, después de la extraordinaria temporada que ha realizado el conjunto cebetista, los hombres de Berni Álvarez afrontarán las dos jornadas que quedan sin presión, pensando únicamente en disfrutar de su juego y conseguir dos victorias antede su público. Esta será la mejor manera de preparar el play-off de ascenso, que el CBT empezará a disputar a partir del miércoles 13 de abril. Pero antes de esta fecha, los jugadores tienen por delante una semana de entrenamientos más corta del normal, después de dos días de fiesta.