Un Nàstic sin complejas quiere derrotar una Córdoba con prisas

Habiendo sobrepasado la barrera de los 50 puntos, el Gimnástico de Tarragona ya sabe qué quiere: intentar jugar la próxima temporada a la máxima categoría del fútbol a nivel nacional. Será un camino muy complicado y, posiblemente, la meta no se acabará cumpliendo. Sin embargo, los de Vicente Moreno se dejarán la piel y, a partir de ahora, no quieren dejar pasar ningún punto, ninguna oportunidad de cumplir un sueño que, hace un verano, era casi impensable.

El equipo tarraconense es bien consciente que no tiene que plantear ningún partido como si fuera inferior a ningún otro equipo, ya que se ha ganado el derecho a considerarse uno de los mejores conjuntos de la Segunda División. Ser tercero en la mesa|tabla clasificatoria a falta de once jornadas para la conclusión del campeonato es un buen indicador para determinar que este conjunto tiene que aspirar a otras cosas a partir de ahora y que se tiene que concienciar que quedar segundo es mucho mejor que finalizar en sexta posición.

El primer paso para poder alcanzar este sueño será el de sumar los tres puntos este domingo (doce del mediodía) contra la Córdoba al Nuevo Estadio. Será un duelo a vida o muerte, ya que los andaluces no llegarán sólo con ganas de ganar, sino con la imperiosa necesidad de hacerlo. La bajada de rendimiento que ha protagonizado al próximo rival del Nàstic desde el inicio de la segunda vuelta|bóveda lo ha convertido en un equipo más en la lucha para|por la promoción de ascenso, cuándo no hace muchos meses era el máximo aspirante a finalizar en una de las dos primeras plazas, que dan derecho al ascenso directo en Primera.

Los cordobeses son uno de los equipos más peligrosos cuando el contrario los deja practicar su juego. El contraataque es su base ofensiva, de forma que guardar la posición en la pérdida de pelota sería la mejor opción de los tarraconenses a la hora de defender las acciones ofensivas del rival. Además, hay muchos jugadores con peligro al ataque de los blanco-y-verdes. Fidel, por banda|lado izquierda, o Pedro Ríos, en el otro lado, son dos futbolistas de máximo nivel, dos jugadores que son capaces de desequilibrar un enfrentamiento en cualquier momento y que destacan, sobre todo, por|para la inmensa calidad que tienen en sus botas.

Además, arriba, la Córdoba tiene dos futbolistas de aquellos que querrían tener todos los equipos de Segunda División. Florin Andone y Xisco son dos puntas, cada uno con sus características –uno más estático y el otro más móvil. Eddy Silvestre, por sanción, será baja de cara al duelo del domingo.

Sin Tejera y Naranjo

Por su parte, el cuadro tarraconense contará con dos bajas de consideración. Son dos futbolistas que no podrán actuar por sanción, por acumulación de amonestaciones. Uno es Sergio Tejera, que el domingo, contra el Numància y en el Nuevo Estadio, recibió la decimoquinta tarjeta amarilla de la temporada (tercer ciclo que cumple el futbolista). El otro es José Naranjo, que en el mismo duelo, contra los sorianos, fue amonestado con la quinta cartulina en lo que va de campaña.

Son dos bajas de consideración, ya que el primero es un titular indiscutible en el centro del campo, mientras que el delantero se ha erigido como máximo realizador de la conjunta grana en lo que va de temporada. Vicente Moreno, sin embargo, cuenta con una plantilla suficientemente amplia como para no sufrir cuando haya dos bajas.

Manolo Reina es indiscutible en la portería, y tampoco parece que tenga que haber novedades en defensa. Daisuke Suzuki jugará como lateral derecho, Mossa lo hará en la banda|lado izquierda, e Iago Bouzón y Pablo Marí actuarán en el eje, siempre con el permiso de un Xavi Batanea que está preparado siempre para entrar al once. En el centro del campo, Aburjania y Madinda, que ayer llegaron a Tarragona después de los compromisos internacionales, serían los escuderos de Emaná. En la banda|lado derecha Jean Luc, a la izquierda Lobato y, en punta de ataque Aníbal, completarían el once.