El Nàstic consigue reinventarse en la pizarra cada semana
Vicente Moreno apostó por cuatro centrocampistas claros contra el Mirandés, y consiguió ganarle la partida al rival
Aunque el final de temporada se está acercando–quedan seis jornadas para concluir la LigaaSegunda División–, Vicente Moreno sigue sorprendiendo a la afición del Gimnàsticde Tarragona cada día. El entrenador del conjunto tarraconense apostó por un dibujo inédito esta temporada, con cuatro centrocampistas natos, sin ningún extremo, y dos jugadores arriba, ninguno de ellos delantero centro nato.
Vicente Moreno salió contra el Mirandés con un 4-4-2, en el cual el centro del campo lo formaban Lévy Madinda, Giorgi Aburjania, Sergio Tejera y Cristian Lobato. Ni ninguno de ellos se puede considerar defensa, extremo, ni delantero. Madinda es un medio defensivo, Aburjania un centrocampista más mixte, y los otros dos son jugadores con mucha calidad en las botas, que acostumbran a jugar un poco más adelantados que los dos mencionados. El hecho es que el Mirandés se presentó en el Nou Estadicon cuatro centrocampistas –cinco en muchas compasas del enfrentamiento– y vio cómo el rival lo igualaba en la medular con respecto a hombres y lo superaba en muchas situaciones del juego. Muchas superioridades numéricas en la medular del conjunto tarraconense que desdibujaban constantemente los de Miranda de Ebro, que acabaron perdiendo 3-2, aunque su segundo gol llegó cuando el duelo estaba completamente decidido.
Sorprendió mucho la disposición táctica del conjunto catalán, ya que Moreno acostumbra a utilizar o bien el 4-2-3-1 o el 4-3-3, dos sistemas tácticos que le han dado muy buen resultado a lo largo de la temporada. En el primero de estos, el entrenador del Nàstic sitúa a dos centrocampistas, últimamente Madinda y Tejera y, como mucho, tira a la izquierda Lobato, dejando la media punta por Emaná y la bandaderecha para un extremo, como puede ser el caso de Jean Luc o de Palanca. En el 4-3-3, juegan tres centrocampistas a que salen entre los cuatro mencionados anteriormente y Juan Muñiz. Ahora, después del experimento probado delante del Mirandés, los rivales tendrán que ir todavía con más cuenta a la hora de enfrentarse con el Nàstic, ya que las variaciones tácticas son infinitas. Incluso, a lo largo de esta campaña Vicente Moreno también ha jugado con tres defensores –o cinco, si los carrilers se cuentan en la retaguardia. Opciones infinitas para alcanzar un objetivo que cada día es más próximo.
La profundidad de plantilla de que dispone al técnico permite todos los tipos de variantes en el dibujo. Desde el mismo momento en que finalizó el duelo del domingo, el entrenador del cuadro tarraconense se puso manos en la obra a pensar la mejor forma de derrotar la Almería, un equipo que vive una situación complicada, que está rozando la zona de descenso, y que jugará con una ansiedad que quiere aprovechar Vicente Moreno para sumar tres puntos vitales en la lucha para las posiciones de ascenso a Primera División.