La Supercopa se marcha a Galicia
El Reus Deportiu se cae 1-2 en un duelo que se decidió a seis minutos del final con la diana de Marc Coy
No pudo ser. La Supercopa de España se va hacia tierras gallegas después de que el Reus Deportiu La Fira cayera derrotado, este domingo por la tarde, delante del HC Liceo, en un partido muy disputado, que se llevaron los visitantes por|para la mínima (1-2).
Intensidad máxima. De hecho, en algunos momentos, incluso, saltaban chispas en el Palau d'Esports. Se enfrentaban dos de los mejores equipos de la temporada pasada en laOK Liga y dos conjuntos que, además, demostraron en esta Supercopa que también serán dos de los firmes candidatos a subir el título liguero 2016-17.
En la fase final de la pretemporada, catalanes y gallegos ya dejaron muestras de lo que mostrarán en las competiciones duras, las largas, las que marcan la regularidad y acaban dando más alegrías. Fue una batalla intensa en el pabellón, sin tregua. De hecho, los primeros minutos fueron explosivos por parte de los dos equipos, aunque, con el paso de los minutos, fue quedándose un único equipo sobre la pista.
Este, fue el Liceo, el cual se convirtió en claro dominador del juego a medida que fueron pasando los minutos. Los rojinegros se vieron obligados a jugar a ráfagas, esperando el actac de los rivales para robar rápidamente la bola y poder buscar la portería de Xavier Malián. De hecho, algunos paros tuvo que hacer el meta visitante, pero si había un gol, este tenía pinta de ser gallego.
El Reus Deportiu La Fira se encomendaba, casi siempre, a su hombre referencia, Raúl Marín. El delantero fue el hombre que más peligro aportó a su equipo, intimidando siempre la defensa rival y luchando todas y cada una de las acciones en las cuales intervenía. El primer tiro, fue local, y lo realizó Platero. Nueve minutos tardó el jugador en realizarlo, pero parecía buena señal. Un minuto después, uno de los árbitros anuló un gol a Joan Salvat por haber impactado la bola con la pierna y, a partir de aquí, despertó la bestia y los gallegos se hicieron los dominadores del duelo.
A los diecisiete minutos, en una jugada trenzada, David Torres subía el primer gol del Liceo. 0-1, y mucho tenía que cambiar el Reus Deportiu si quería variar la situación. Sí que pudo hacerlo pocos según después, con un fuerte excepto Marc Ollé, que chocó con la madera, pero la primera parte se le hacía demasiado larga en un Reus que casi se marcha con otro susto al descanso. Lo hubiera hecho si Di Benedetto hubiera culminado una gran acción combinatoria en la cual participaron los cuatro jugadores del Liceo.
Gran cambio
Mucho cambiaron las cosas en la segunda mitad. Los reusenses han salido a por|para todas y han sido los claros dominadores, tanto con respecto a juego como por ocasiones. Y es que la ocasión lo merecía. El pabellón empezó a rugir y, tan pronto como el árbitro dio el silbato inicial Platero disparó a portería. En pocos según, siempre sin llegar al minuto de juego, el mismo Platero volvió a intentarlo, encontrándose con Malián, siempre muy acertado.
Un minuto después, en el 27’, era Albert Casanovas el que probaba suerte, pero también se encontró con Malián. El defensor, precisamente, fue el gran protagonista de la siguiente acción, la que, en el 31’, dio alas en el Reus Deportiu La Fira con el empate. Tuesta y él mismo iniciaron una pared, que finalizó este primero con un gran gol. Diana de bella factura que volvía a poner el partido en mesas|tablas. Mucha tensión en la pista, y un Reus que sacaba las fuerzas desde no se sabe dónde para seguir asediando el marco rival. Raúl Marín tuvo la oportunidad de cambiar el electrónico en el 36’, pero va Malián le desvió una falta directa.
No se quedó con los brazos cruzados el Liceo. Marc Coy, en el 38,’ también podría haber marcado, pero no le ganó el 1 contra 1 al portero del Reus. Cogió impulso el cuadro gallego, el cual arrinconó, durante unos minutos, los de Mariotti. Primero, con una falta directa mal definida por parte de Josep Lamas y, después, con dos rasgos|tiros consecutivos que obligaron a Rodrigues a lucirse.
Tanto empujó el Liceo que, en una de estas, Marc Coy fusiló Rodrigues. Un tiro lejano en un contraataque, prácticamente imopossible de parar.
Faltaban seis minutos y el Reus necesitaba de los suyos, los cuales respondían con aplausos y gritos de ánimo para espolear un euqip de que tenía poco tiempo por forzar, al menos, la prórroga. A dos minutos del final la tuvo Marc Torra, de falta directa, pero le falló|faltó decisión a la hora de decidir disparar. El cronómetro mandaba y, aunque los reusenses se vertieron completamente, el Liceo se acabó llevando el título.