Las casualidades no existen

El mérito, lo destacaba el mismo Natxo González, con el 1-0 del derbi en el bolsillo, cuando decía que la situación del conjunto reusense «ya no es una casualidad, ya no es una inercia». La victoria en un partido histórico a la Segunda División, en la temporada del estreno al fútbol profesional, como a titular de una de las plazas de play-off en Primera y con el portero menos goleado de la categoría o el séptimo máximo anotador en sus filas, ha dado lugar a un cóctel de emociones para la afición del CF Reus, en qué, todavía a la jornada 15, pocas cosas le quedan para ver conseguir en un equipo en que ha hecho pequeñas las expectativas. El listón del duelo con el Nàstic, pendiente de superar desde hacía trece años, ha quedado también atrás en este camino reusense por la plata. Y aquello que, en un principio, se habría podido atribuir al empuje del ascenso a Segunda, sólo puede entenderse ahora como un ejercicio de madurez y de reacción. Como detrás muestra, una lectura un pelo más profunda del derbi, la que hacía también el entrenador encarnado-y-negro: «Veníamos de unos resultados que podían generar alguna duda y nos estaba costando mucho ganar en casa. Ha sido fantástico».

De este 1-0 magnífico podrán dar testimonio casi 4.200 espectadores, los que ocupaban el total de las localitsts del Estadi, afortunados por haber adquido una entre las entradas que la euforia rojinegra y las ganas de derbi agotaron en cuestión de horas. De hecho, el triunfo contra los hombres que dirige Vicente Moreno era el primero que se adjudicaba el CF Reus desde que pasara por encima del Lugo (2-1), en la undécima jornada de Liga, justo antes de encadenar las tres derrotas que habían hecho caer el equipo de las plazas de play-off, una zona de que los reusenses casi ya han hecho su casa. Contra los gallegos, veían portería Máyor –que abría la lata todavía al minuto 24– y el pichichi Fran Carbia, que colocaba el 2-0 dos minutos más tarde y antes de que los de Luis César intentaran lucirse con un remontamiento que no conseguirían consumar.

Más recursos a la rueda

A partir de entonces, faltaban los resultados pero el equipo vivía feliz en otros capítulos. La vuelta a la disponibilidad de David Haro, Chrisantus y Vítor Silva, prácticamente o totalmente sin participación en esta temporada 2016-17 a raíz de lesiones, va incremengar los recursos a disposición de Natxo González para seguir alimentando la leyenda de este aterrizaje al fútbol profesional. Haro y Chrisantus, de hecho, disfrutarían también de minutos al derbi, en sendos cambios.