El Ayuntamiento pondrá el Estadi en manos del CF Reus mediante una concesión
Se limitará, por normativa, el paso entre gradas de Lateral y Gol; el club quiere cerrar el curso con 3.600 abonados
El acuerdo sobre el uso de las instalaciones del Estadi la temporada 2017-18 está más cerca y llegará en forma de concesión. Así lo anunciaba el alcalde de Reus, Carles Pellicer, ayer durante el tradicional desayuno de Navidad con la prensa, en qué apuntaba que la «concesión se acaba de estudiar y esperamos que pronto esté terminada» para, así, hacerse efectiva en los próximos meses. El CF Reus perseguía la alternativa desde que entrara en esta etapa orientada al fútbol profesional y, aunque no precisaba detalles más allá del acuerdo con el consistorio, el conseller delegado, Joan Oliver, apuntaba también ayer el «deseo» de que «el año que viene podamos firmar el convenio», el cual «está ahora en un proceso de trabajo interno por parte del Ayuntamiento». Lo hacía en el marco de la presentación de la campaña de abonos para la segunda vuelta, que el CF Reus impulsa bajo el lema La Segona, a l'Estadi, y que querría acabar con «cerca de 3.600 abonados, el 80% de la capacidad» actual del feudo reusense. A día de hoy, son 2.500 los aficionados con carné, que están dejando cada jornada ilusionantes estampas en la casa rojinegra.
Los precios para asistir lo que queda de esta primera temporada del CF Reus en Segunda oscilan entre los 99 euros de los Goles y los 299 que costará mirarse el tramo final de Liga en la Tribuna Alta. Hacerlo en Tribuna Baja tendrá un precio de 199 euros y, en Lateral, de 149. Y es que, con la reanudación de competición, las graderías de Lateral y Goles se volverán, por normativa de LaLiga, estancas. Es decir, no será posible el paso entre ambas zonas durante el partido y, al momento de abonarse, los seguidores tendrán que indicar dónde prefieren sentarse.
A la CF Reus Store
Los que obtuvieron su carné al principio de curso y, por lo tanto, no tenían distinguida la localidad donde ubicarse, tendrán que dirigirse a la CF Reus Store –que abría hace pocos meses a uno de los locales del paseo comercial de El Pallol– para pronunciarse si es que quieren los Goles y, si no lo hacen, serán automáticamente asignados a Lateral. Más allá de eso, y con la finalidad de «garantizar la comodidad de los espectadores», el Estadi numerará los asientos y se está sopesando también la reubicación de los seguidores de los equipos visitantes en el feudo rojinegro. La voluntad de hacerlo, «venía desde antes del inicio de la temporada, pero no fuimos a tiempo», apuntaba a Oliver, a raíz de las obras para adaptar el equipamiento como uno de los escenarios de los Juegos del Mediterráneo inicialmente previstos para el 2017.
Con 19 jornadas de Liga superadas, el Estadi se ha convertido en uno de los que exhibe un mayor porcentaje de ocupación entre todos los clubs en el fútbol profesional. Todo, al amparo del creciente vínculo entre club y ciudad que empuja cerca de 4.000 seguidores al campo en cada cita del CF Reus como locales para mirar al equipo brillar en la categoría de plata. En el terreno puramente deportivo, Joan Oliver explicaba que «hemos hecho la parte más fácil, entre comillas, del trabajo, y ahora lo que nos viene nos tiene que servir para rematarla».