El Nàstic, pendiente del «sí» de Merino para empezar a trabajar con el equipo

La decisión del técnico Vicente Moreno de abandonar el cargo, un paso que el valenciano consumaba la noche del viernes con la presentación de la renuncia ante el presidente Josep Maria Andreu, ha acelerado la maquinaria del Nàstic en la remodelación del proyecto de cara a la segunda vuelta. El de Massanassa, pendiente tan sólo del trámite de la aceptación de su adiós por parte del Consejo de Administración, podría tener un recambio en las próximas horas. El club ha puesto una propuesta encima de la mesa del entrenador Juan Merino (La Linea de la Concepción, 1970), y el gaditano llegará esta noche a Tarragona para reunirse con el presidente y el secretario técnico granas y tomar una decisión sobre esta oferta. En caso de «sí», y siempre una vez materializada de lleno la salida de Vicente Moreno, Merino empezaría a trabajar con la plantilla tarraconense de manera inmediata, en la reanudación de los entrenamientos que está prevista para el jueves. El técnico andaluz se encontraba sin equipo desde que dirigiera, durante la segunda mitad de Liga de la 2015-16 y como relevo de Pepe Mel, un Betis que dejó instalado en la décima plaza de la clasificación.

La pobre imagen del Nàstic en los últimos enfrentamientos y especialmente en el último compromiso del 2016, en Copa del Rey, contra un Alavés que eliminaba a los tarraconenses de la competición con un 6-0 global, habría precipitado el despido voluntario de Moreno, igualmente condicionado por la determinación del club de prescindir de su preparador físico, Raúl López, y también, claro está, por los resultados que habían etiquetado el equipo como colista de la Segunda División. En las puertas de una revolución de invierno que, con profundos cambios en el vestuario a la vista, está llamada a incrementar las opciones de éxito del conjunto grana, y poseedor de la confianza llena por parte de la directiva que lo había ratificado reiteradamente a largo de las últimas semanas, el técnico ha puesto el punto final al periplo grana después de una retahíla de jornadas en lucha para dejar atrás la zona de descenso.

Con respecto a Juan Merino, todo apunta el acuerdo está próximo y de las últimas conversas de esta noche dependerá la luz verde a la operación –a la espera de la apertura del mercado que se producirá e 2 de enero–, una vez se haya completado el trámite por la desvinculación de Moreno al Consejo de Administración. Merino tendría que desplegar entonces el cuerpo técnico que lo acompañaría en esta nueva etapa a Tarragona, ya con la mente en la próxima cita contra el Tenerife, y escoger el nombre del segundo entrenador y del preparador físico.

Emaná i Barreiro

En aquello estrictamente relativo a la plantilla, el Nàstic ha oficializado ya la vuelta de Achille Emaná, que firmará por lo que queda de temporada, procedente del Tokushima Vortis. El futbolista camerunés finalizó la pasada campaña con grandes registros deportivos, 9 goles y 5 asistencias en 37 partidos. El club también ha hecho oficial el acuerdo con Manu Barreiro, delantero que se incorpora a la disciplina grana desde el Alavés se comprometerá también por lo que queda de curso. El desembarque de Luismi como cedido se tendrá que resolver igualmente hoy, a pesar de encontrarse también muy próximo.