Un Huesca que pierde fuelle y con bajas
Los aragoneses, rivales del Nàstic este sábado, tienen tres sancionados y podrían cambiar del 4-2-3-1 al 4-4-2
Un equipo que va de subida, contra uno que va de bajada. Simple, pero cierto. Gimnàstic de Tarragona y Huesca se enfrentarán este sábado (seis de la tarde) en el Nou Estadi con sensaciones completamente contrapuestas, y con situaciones bien diferentes en la tabla clasificatoria.
El Nàstic es último en la clasificación, pero llega al duelo después de ganar en Lugo (2-3) y habiendo sumado cinco puntos de los nueve últimos posibles. Por su parte, los aragoneses viven en la zona tranquila, undécimos, con 28 puntos, pero acumulan cuatro partidos sin ganar y, en los dos últimos, han caído derrotados.
El conjunto grana tiene la intención de aprovechar el impulso que supone el hecho de haber ganado en el campo de uno de los mejores equipos, hasta ahora, de la categoría de plata y, por este motivo, no piensan en otra cosa que no sea la victoria. En frente, uno Huesca que llega mucho herido, no sólo por el hecho de llevar más de un mes sin ganar, sino porque tiene algunas ausencias en forma de lesiones o sanciones bastante significativas.
Akapo no podrá jugar después de haber visto la tarjeta roja directa en el último partido, y Samu Sáiz y Melero tampoco podrán saltar al césped por acumulación de amonestaciones. Si sumamos la baja del lateral derecho Nagore, por una lesión de rodilla, se puede apreciar como el Huesca no llega en las mejores condiciones a un enfrentamiento que puede servir de punto de inflexión para los dos equipos. Para el Nàstic, para quedar a un paso de sacar la cabeza de la zona crítica y, para el Huesca, para romper una mala racha o para empezar a preocuparse.
Juan Antonio Anquela, entrenador del Huesca, se tendrá que reconvertir a causa de las bajas, y podría cambiar de sistema para visitar al Nàstic. El técnico seguramente prescindirá de un hombre en el centro del campo y apostará por uno claro 4-4-2, dejando atrás el 4-2-3-1 con que juega habitualmente. Así, en ataque, pasarían a jugar Vinicius Araujo, llegado procedente de la Valencia en este mercado de invierno, y Borja Lázaro. Ambos futbolistas generan peligro sobre todo entre líneas, y los tarraconenses tendrán que estar muy atentos a sus incursiones.
Hecho para salvarse
El Huesca es un equipo que se ha confeccionado para poder luchar por la permanencia. De hecho, sus números son buenos y suficientes para alcanzar este objetivo siempre que se puedan mantener hasta a final de temporada. Los 28 puntos que suma actualmente son cuatro menos que los que tiene el Oviedo, primer equipo que disputaría la promoción de ascenso a Primera División. Los aragoneses están cinco puntos por encima de la zona de descenso, con lo que, de momento, están bastante tranquilos en este sentido.
Siete partidos han ganado los de Anquela durante la 2016-17, por|para siete empates y ocho derrotas sufridas. El balance de goles es positivo, con 28 dianas anotadas y 25 apretones de manos.