Fiesta grande para recibir a los campeones de Europa
Más de 200 personas se reúnen en la plaza Prim para recibir a sus héroes
En medio de aquella atmósfera mágica de que se rodea una ciudad cuando celebra grandes hitos deportivos, Reus recibió ayer, con una bienvenida al mismo tiempo íntima y explosiva, los artífices de la octava Copa de Europa que se embolsa el Reus Deportiu. ¡El célebre Shalalà y más de un «Henriques quédate!» pusieron banda sonora a una noche que arrancaba desde el Palau d'Esports, donde la plantilla rojinegra había brindado, hacia las nueve de la noche, emocionada y eufórica, el trofeo a su afición coincidiendo con el 50º aniversario de la primera vez.
Después, cerca de 1.000 metros hasta llegar a la Prim que el equipo recorrió a bordo de un minibús vestir otra vez al general de rojinegro. El retorno de los sticks y de las grandes emociones a la plaza. Quien tenía que estar, ya los esperaba. Y también sus colores. La afición se colocó a la altura de una hazaña de enormes dimensiones. Y estalló en cánticos y aplausos que se alargaban desde la noche, convocados por el club para participar en esta comunión que no se repetía desde la 2008-09. Hoy, el Ayuntamiento de Reus recibirá a los héroes para seguir disfrutando desde el palacio municipal.