El último brindis en el Estadi

De 0 a 100 en sólo tres minutos. El CF Reus se llevó ayer, con dos goles de Vítor i Benito en el 20 y en el 23’, el duelo con un Valladolid que buscaba en el Estadi opciones de colarse en Primera. En el último partido como local, y al cierre de un ciclo que en pocos días desmembrará parte del bloque del ascenso y muy probablemente desemboque también en un relevo en el banquillo, el equipo rojinegro brindó por última vez con su afición. La victoria, una de las más amplias que habrá conseguido en esta campaña, coloca el conjunto de la capital del Baix Camp noveno con 55 puntos en la cuenta. Y pone el punto final, a falta de visitar el campo del Almería el próximo fin de semana, a una temporada de ensueño, la del debut del club en Segunda A. Despide, finalmente y de la mejor forma posible, piezas que han encontrado un nuevo horizonte lejos de Reus después de resultar artífices de un curso que quedará para la historia de la entidad. Otro más.

Todo, al desenlace de una jornada de horario unificado en qué los seguidores rojinegros –como todo el resto–, asistieron sin crono, una noche de radio donde el club no tuvo ocasión, por normativa, de reservar un minuto de silencio para Emili Vicente, a quien dirigiera la plantilla durante la 2013-14 y que hace un par de semanas perdía la vida a causa de una parada cardiaca mientras practicaba ciclismo a una zona de montaña, en Andorra.

Menos de media hora tardó el conjunto rojinegro a tirar por el suelo las expectativas del Valladolid, que visitaba el feudo del CF Reus dispuesto a puntuar siete días después de que los de Natxo González certificaran la permanencia en Segunda. Y a mantenerse, así, del todo vivo de cara al play-off que venía acosando. El técnico había dispuesto al verde del Estadi su once de gala, y había hecho sitio a buena parte de los protagonistas en una noche de emotivos adioses.

Convencido de seguir jugando la pelota desde de atrás, el equipo de la capital del Baix Camp sólo enfrentó la presión visitando durante unos breves compases. A partir del 10’ y avalado por la lucha personal de Edgar Badia por no encajar. La amenaza de los de Pucela se resumió, con todo, en alguna oportunidad en pelota parada y un chute de Javi Moyano que tampoco pasó de la anécdota.

Magia portuguesa

Antes, Miramón había puesto el CF Reus al partido y Haro espoleaba el ataque con una insistencia loable. El 1-0 lo cuajaba Vítor Silva de falta directa, una diana de bellísima factura, impresionante, que levantó de sus localidades a los 3.869 espectadores al Estadi. Y eso que, desde las graderías, sin crono y ante un oponente con el aliciente de la promoción en Primera, transcurrían muy pesados.

Alberto Benito no les dio margen para caer en el amodorramiento de una noche del domingo. Sólo tres minutos después de que Vítor hiciera subir la ventaja mínima, el de Altafulla aprovechaba un mal rechazo de la retaguardia visitando para sorprender con un chute potente, desde más de 30 metros, y ligar la victoria en la última jornada de la temporada en casa.

«¡Benito, quédate!» era el despido reusense en un lateral que, muy probablemente, competirá la próxima campaña en las filas de la Zaragoza. En la misma dirección apuntan los rumores sobre Ángel Martínez, ayer en el banquillo. Y sobre el propio entrenador Natxo González.

Una ilusión compartida

Con el 2-0 el equipo se gustó. Y se gustó más, y quizás también por primera vez, la afición rojinegra, que vivía el final perfecto en esta espléndida primera campaña en la plata. El CF Reus querrá cerrarla –y el objetivo se presenta ahora lo bastante plácido– instalado a la mitad superior de la clasificación a Partir de aquí, trabajo hecho y poca historia. Quizás, esta sí, la de la ilusión. La que desprendía un equipo dispuesto a devolver a los seguidores el regalo de haberlos llevado en brazos hasta el fútbol profesional donde continuarán la 2017-18.

El Valladolid irrumpió sin mucho más a decir en el segundo acto dónde el argumento no podía ser tan interesante. Entre alguna intervención brillante y habitual de Badia, más de una centrada de Benito que no encontró a quien la convirtiera en gol y un remate de cabeza de Pichu Atienza que, ya en los últimos 20 minutos, tampoco entró, Espinoza y Michel trataban de enderezar alguna cosa. Miramón tuvo el 3-0 en 15’ del cumplido del tiempo reglamentario, después de driblar Becerra. Sólo el pie de un defensa visitando se interpuso entre el atacante, que volvía a competir reubicado como pieza clave de la defensa, y la diana. Después, el silbido final. Y el triunfo. La celebración esperada con la gradería. La sensación de una campaña dulce. Y una escena, la del brindis, de la mano delante de los suyos. El último brindis en el Estadi.

FICHA TÉCNICA

CF Reus

Edgar Badia, Miramón, Olmo, Atienza, Benito, Folch, Garai, Vítor (Guzzo, 89), Haro, Fran (Ricardo Vaz, 73) y Máyor (Edgar Hernández, 80).

Valladolid

Becerra, Moyano, Lichnovsky, Álex Pérez, Entumezca, Leão, Jordán (Alex López, 58), Jose, Míchel (sergio, 82), Espinoza (Drazic, 60) y De Tomás.

Goles

1-0, Vítor (21); 2-0, Benito (24).

Árbitro

Cuadra Fernández (colegio balear). Ha mostrado amarilla en los locales Máyor (60) y Fran (73); y a los visitantes Jordan (55) y Alex López (82).

Incidencias

El Estadi Municipal de Reus acogió a 3.869 espectadores.