Duelo de estrenos en los banquillos

El del domingo en el Estadi Municipal del Reus –20.30 h– será un derbi de primeras veces para los dueños de los banquillos de los dos equipos. Con respecto a Aritz López Garai, no sólo será el primero como entrenador –la temporada pasada ganó dos como jugador–, sino el estreno en partido oficial como técnico en el feudo roig-i-negre. En el caso de Lluís Carreras, será también la primera vez que visita el campo reusense, que este mediodía presentaba algunos síntomas de estar afectado por un hongo aparecido por las altas temperaturas. «Queda mucho para el domingo, esperamos que esté perfecto aquel día», ha deseado López Garai en este sentido.

Lluís Carreras avisa de que el derbi «no se puede enfrentar como un partido más, sabiendo la rivalidad que hay en el entorno, y entre los clubs y los jugadores. Se tiene que lindar como un partido especial con unos condicionantes que me guardaré para mis jugadores». Por su parte, López Garai define este enfrentamiento como «un partido bonito para todo el mundo, sobre todo para los espectadores de las dos ciudades». «Todos los derbis tienen un matiz especial, y este no es una excepción. Nos quedan unos días para preparar a los chicos para enfrentarse de tú a tú a un gran rival como es el Nàstic», añade el técnico vasco, que no quiere aprovechar el hecho de tener menos tiempo para prepararlo para adoptar un papel de víctima: «No me preocupa el tema físico. Eso acaba de empezar, y tener un día más o menos no cambia nada».

Los roig-i-negres volvieron el martes de Lugo con un punto en el zurrón y cargados de buenas sensaciones, mientras que los grana quieren reivindicarse después de una derrota en el estreno en casa. Carreras quiere que sus hombres afronten el partido olvidándose del del domingo pasado: «Hoy les decía a mis jugadores que no condiciona nunca el resultado previo para el partido que tienes que afrontar a continuación. Son partidos diferentes, con condiciones y lugares diferentes. Creo que nos merecíamos los tres puntos por ocasiones o por golpes, como dirían en el boxeo, pero el que gana es el que tiene más acierto».

Con respecto a los jugadores disponibles, el técnico reusense descarta «prácticamente» Vítor Silva para este enfrentamiento, pero es optimista con el extremo David Querol y el central Atienza: «Creo que llegarán, pero es muy importante no forzarlos».

Con respecto a los nuevos mediocentros incorporados esta semana -Jon Gaztañaga es oficialmente grana desde el martes, y Juan Domínguez roig-i-negre desde ayer–, los entrenadores afirman que podrían utilizarlos en el once inicial del domingo. «Es apto, está en condiciones y a disposición», ha afirmado Carreras sobre su nuevo refuerzo mientras que López Garai ha declarado que Domínguez «viene de entrenar y competir a nivel grupal y, por lo tanto, tiene las mismas opciones que el resto».

Con respecto a las respectivas aficiones, los entrenadores les piden que animen los equipos como han hecho hasta ahora, pero que lo hagan con deportividad, y siendo respetuosos con el rival. Una cosa la tienen clara los dos: si pudieran, cambiarían su lugar en el banquillo por una plaza al once inicial dentro del terreno de juego. «Lo mejor del fútbol es jugar, sin ningún tipo de duda. Entrenar es la segunda cosa mejor», asegura Carreras. Lo suscribe también López Garai, que hace poco más de dos meses cambió un rol para el otro. Con un partido oficial en los hombros, el vasco ya ha notado que «se sufre más, en la banda, porque ves cosas que no se ven de dentro, y son difíciles de controlar».