Diari Més

Dos golazos para empatar al pichichi

El Valladolid, máximo goleador, iguala una proeza de Querol y un chute en la escuadra de Ledes en un duelo que el Reus pudo sentenciar

Querol, autor d'un gol, es convertia en un dels millors del partit.

Dos golazos para empatar al pichichiLaLiga

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El CF Reus empató ayer contra el Valladolid, el equipo más goleador de la categoría, gracias a dos golazos de David Querol y Gus Ledes que los castellanos consiguieron igualar en dos jugadas a pelota parada con desenlaces extraños. El 2-2 definitivo llegó poco después que los rojinegros hubieran podido casi sentenciar con un remate de cabeza de Juan Domínguez, picado en el suelo con toda la intención, que el portero visitante Masip pudo desviar por centímetros. Eso dio un sabor agridulce a la igualada, a pesar de haberse obtenido contra un rival de calidad.

Los jugadores rojinegros saltaron en el terreno de juego enfundados con camisetas donde se leía «Fuerza Ricardo», un mensaje de ánimo para su compañero, que probablemente se perderá lo que queda de temporada después de una lesión en la rodilla en que se produjo cuando estaba en el mejor momento de su carrera. La de ayer fue la fiesta del ataque, y por lo tanto la mejor dedicatoria por el extremo portugués.

Querol contrarrestó un comienzo de partido en que el Valladolid salió como lo que es: una apisonadora con el gol permanentemente entre ceja y ceja, encabezada por un ariete hambriento que, con el de ayer, ya lleva 11 en lo que va de liga. En cuatro minutos ya habían generado dos ocasiones de peligro clarísimas. La mejor noticia es que el Reus resistía el embate del rival con una mezcla de fortuna, contundencia y talento bajo palos.

El gol de Querol fue como aquellos puñetazos de Muhammad Alí que hacían titubear a su rival después de que este llevara muchos minutos sin descanso de golpearlo. Después de pasarse 25 minutos encajando los ataques del Valladolid el Reus hizo valer su presión asfixiante para aprovechar un error del defensor en el rechazo, birlarle la pelota y plantarse solo delante de Masip. El reusense lo batió con un chute bien colocado a su izquierda, con mucha más sangre fría que ángulo para rematar. Un diamante, recompensa merecida por un hombre que no ha parado de picar piedra al ataque rojinegro.

La primera clara de los castellanos se produjo cuando todavía no se habían agotado los primeros dos minutos del partido, y acabó con un rechazo de Olmo con el pecho. La segunda con una parada de aquellas que sorprenden a quien no conoce a Edgar Badia. Sacó un pie milagroso para desviar el chute de Iban Salvador, que se había quedado solo ante él. El paro fue providencial también a nivel anímico. No sólo porque salvó un gol matinal, sino porque enmendó unos minutos de juego de los disparates en qué tanto Olmo como Atienza habían fallado sendas pasadas interceptadas por la delantera rival, quizás sorprendidos por la presión asfixiante que les estaban haciendo.

La parada fue un punto de inflexión. Una oportunidad para empezar de nuevo, que el Reus aprovechó para coger aire. Los rojinegros empezaron a ganar metros y dieron un mínimo de pausa para romper el ritmo frenético de los visitantes. Pero sólo fue una tregua. Al cabo de diez minutos Miramón tuvo que cortar un chute de Mata, que había disparado después de recibir la pelota con una pasada de Iban. Al madrileño ya se le había empezado a abrir el hambre.

Querol no se cansa nunca de intentarlo. Lo deja todo en cada jugada. Como aquella en el minuto 20, en el que llegó hasta la línea de fondo para centrar en Hernández, pero un defensor la rechazó antes de que la pudiera conectar. O como la del gol. Pelota aparentemente sin peligro, excepto si tienes Querol a tu alrededor. Un mínimo error y ya es suya. Y ya se ha plantado ante el portero. Y ya lo ha clavado en el fondo de la red.

La maquinaria ofensiva del Valladolid seguía engrasada, y en el minuto 28 Ángel volvió a avisar con un remate de córner que salió ligeramente por encima del travesaño. Entonces llegó el 1-1. Fue una falta picada por Toni Villa. El joven de 22 años hizo en el Estadio Municipal de Reus una actuación de «recuerda mi nombre». Cada zancada, cada toque de pelota, regala los sentidos. El rendimiento, sin embargo, llegó en una jugada menos refinada. Falta picada rasa, impacta en Miramón, que no la puede rehusar, y allí había Mata. Quién si no. Fusiló Badia sin que pudiera hacer nada.

El intercambio de golpes siguió, y el Reus no se encogió. En el 39’ Gus Ledes envió una falta a Atienza, que estaba a la línea de fondo. Este la dejó con la cabeza a Querol para que rematara de volea desde la altura del punto de penalti, pero el chute salió por encima del travesaño. Iban, lo que había puesto a prueba a Edgar Badia, hizo impactar un chute en la malla lateral en el 43’.

En la segunda parte, el CF Reus sufrió cierto bloqueo, sin que el rival generara excesivos problemas en su portería. Entonces Íñiguez entró por Cámara para apuntalar la defensa y asegurar la salida de la pelota. La maniobra dio alas al equipo, que cogió la iniciativa. A partir de aquí vinieron los minutos en que los reusenses hicieron el 2-1 y se quedaron en las puertas del 3-1, aunque se tuvieron que conformar con el empate.

En el 69, Borja Fernández hizo una pasada preciosa a Miramón, con el que se tropezó con Masip cuando intentaba un gol que se merece más que nadie. El rebote volvió a llegar al lateral, que la dejó para Gus Ledes para que lo enviara a la escuadra desde cerca de la frontal. El 2-2 definitivo llegó en un córner disparado por Giannotas, que acabó enviando en el fondo de la red al capitán Ángel lanzándose e impactando la bola con el pecho.

Ficha técnica

CF Reus

Bahía, Miramón, Olmo, Atienza, Menéndez, Gus Ledes, Borja (Haro, 85'), Juan Domínguez, Cámara (Íñiguez, 55'), Querol (Tito, 74') y Edgar.

Real Valladolid

Masip, Ángel, Olivas, Calero, Luismi, Mata, Antoñito, Toni Villa, Óscar Plano (Gianniotas, 80'), Iban Salvador (Míchel, 67') y Anuar (Villalibre, 75').

Goles

1-0, Querol (25'). 1-1, Mata (32'). 2-1, Ledes (68'). 2-2, Ángel (85').

Árbitro

Pulido Santana (colegio canario). Mostraba amarilla a los locales Atienza (51'), y a los visitantes Calero (50').

Incidencias

El Estadio Municipal de Reus acogía a 2.138 espectadores.

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